Los centros electorales en Irlanda abrieron a las 06.00 GMT (07.00 hora local) de hoy para la votación en el referéndum sobre el Tratado de Lisboa, un texto clave para la reformar las instituciones de gobierno de la Unión Europea (UE).

Los centros de votación permanecerán abiertos durante quince horas, hasta las 21.00 GMT (22.00 locales), mientras que el recuento de los sufragios comenzará el día siguiente a las 08.00 GMT (09.00 locales).

Según fuentes oficiales, se espera que el Gobierno irlandés anuncie el resultado final del plebiscito hacia la media tarde de mañana, viernes.

Algo más de tres millones de irlandeses, repartidos en las 42 circunscripciones de la República, están llamados a las urnas en una jornada en la que el índice de participación determinará en gran medida el resultado final de la consulta popular.

El Gobierno y sus aliados durante la campaña del referéndum -los principales partidos de la oposición, la mayoría de los sindicatos y la patronal, entre otros-, confían en que el electorado acuda en masa a depositar su voto.

Según los expertos, un alto índice de abstención beneficia, en principio, a los detractores del documento -representados por el Sinn Fein y varios grupos pacifistas, izquierdistas y ultraconservadores- ya que éstos provienen de asociaciones minoritarias que, normalmente, movilizan a gran parte de su electorado.

La buena climatología, apuntan los observadores, también jugará un papel importante para sacar a la calle el voto del indeciso, que, según las encuesta, aún supera el 20 por ciento. Los últimos sondeos también indican que las diferencias entre el bando del "sí" y el "no" son demasiado estrechas como para predecir el signo del ganador.

La votación en alguna de las islas del noroeste y oeste del país ya comenzó el pasado martes en previsión de que las malas condiciones climatológicas no permitan el rápido traslado a Dublín de las urnas para proceder al recuento manual.