Según la televisión pública iraquí "Al Iraqiya", el avión del jeque Abdala aterrizó esta mañana en el aeropuerto de Bagdad, donde está previsto que se reúna con el presidente del país, Yalal Talabani, y el primer ministro, Nuri al Maliki.

La llegada del titular de Exteriores emiratí se produce tras las insistentes llamadas de EEUU y del Gobierno iraquí a que los países árabes restablezcan sus vínculos diplomáticos con Irak y normalicen sus relaciones.

Desde el secuestro y posterior asesinato del embajador egipcio en Bagdad, Ehab al Sharif, así como la muerte de diplomáticos argelinos y marroquíes en julio de 2005, ningún país árabe ha enviado a un embajador a Bagdad.

Los estados árabes mantienen abiertas sus misiones diplomáticas, pero en éstas tan sólo hay trabajadores locales y algún representante de rango bajo.

Arabia Saudí y Kuwait prometieron en las últimas semanas enviar embajadores a sus legaciones en Bagdad, pero hasta el momento esto no ha sucedido.

Emiratos fue uno de los pocos países árabes que mantuvieron sus embajadas en Irak tras la invasión iraquí de Kuwait, en 1990.