El presidente ruso, Vladimir Putin, optó ayer por salir al paso de los rumores sobre su vida privada que apuntaban que se había divorciado en secreto para casarse con la campeona rusa de gimnasia Alina Kabayeva, de 24 años. De esta forma, negó las informaciones lanzadas por un periódico ruso y que ahora podría enfrentarse a una demanda por parte de los directamente implicados.

En vista de sus declaraciones, parece ser que Putin, de 55 años, no seguirá el ejemplo de Nicolas Sarkozy, recientemente casado con la cantante y modelo Carla Bruni. Preguntado por la periodista rusa Natalia Melikova, durante una compracencia conjunta con Silvio Berlusconi, el ahora presidente pero futuro primer ministro de la Federación Rusa refutó los rumores alegando que "no hay ni una palabra verídica". En este sentido, subrayó que las alusiones a sus supuestas relaciones extramatrimoniales son falsas, si bien reconoció entre bromas que le gustan "todas las mujeres de Rusia". "Nadie se ofenderá, supongo, si digo que las mujeres rusas son las mujeres más bellas del mundo", añadió. Como deferencia al país anfitrión del encuentro, Putin señaló que si alguien puede "competir" en belleza con las féminas rusas "son las italianas, solamente".

Por su parte, durante la comparecencia en Cerdeña, también se refirió al asunto Silvio Berlusconi, especialmente en cuanto habla de algo que envuelva a mujeres. En esta ocasión, pregunto a la periodista que abrió la rueda de prensa con la pregunta sobre Kabayeva si representaba a todos los reporteros de su país, a lo que ésta respondió que sólo hablaba por su boca. Entonces, Berlusconi bromeó sobre la extensión que podría tener la comparecencia y posteriormente, mientras Putin hablaba, simuló portar un rifle con el que apuntaba a la periodista.