"Ser una rubia es un estado mental. Puedes ser rubia por fuera o por dentro. Se trata de ser optimistas y no tomarse la vida tan en serio", señaló a Efe Marina Volóshinova, secretaria general del Partido de las Rubias y morena natural.

Lo que originariamente era un minoritario club de amantes de las rubias en internet, se ha convertido ahora en una formación política que aspira a presentar a una candidata en las elecciones presidenciales de 2012.

El partido ya cuenta con 5.000 miembros -un tercio de ellos hombres- y la lista de espera es "larga", según Volóshinova, economista de profesión.

"Me teñí una vez, pero no me quedaba bien. Para ser miembro no hace falta ser rubia. Eso sí, se necesita la recomendación de otros dos miembros y superar un período de prueba, en el que el aspirante debe demostrar un compromiso activo con el partido", señaló.

El emblema del partido es un retrato de la famosa "Mandy", la joven rubia que protagoniza una famosa serie de dibujos animados y que aparece con un pronunciado escote y una margarita en la mano.

"Una rubia nunca pasa desapercibida. Siempre llama la atención.

Además, es el eslabón más débil. Tanto hombres como mujeres las ridiculizan y nadie las toma en serio. Hagan lo que hagan, son siempre guapas y tontas", comentó.

Pese a que la Unión Soviética fue uno de los estados pioneros en cuanto a la inserción de la mujer en el mercado laboral en la primera mitad del siglo XX, el movimiento feminista en Rusia aún está en ciernes.

Dos mujeres, Elvira Nabiúllina y Tatiana Gólikova, de apenas 40 años, encabezan los ministerios de Economía y Sanidad, pero en la Duma únicamente hay 45 diputadas de un total de 450.

Una mujer, Valentina Matviyenko, es gobernadora de la segunda ciudad rusa, San Petersburgo; mientras en el mundo de los negocios sobresale la empresaria de la construcción Elena Batúrina, esposa del alcalde de Moscú, con una fortuna de 7.000 millones de dólares.

Volóshinova adelantó que piensan ponerse en contacto con rubias "famosas" como la tenista María Sharápova; Svetlana Medvédeva, la esposa del presidente electo ruso, o Ksenia Sobchak, presentadora de televisión conocida como la "París Hilton rusa".

"Esperamos recibir su apoyo. Nos sería de gran ayuda para combatir los prejuicios. Para los hombres rusos, es más fácil tratar mal a las rubias, que de igual a igual. Eso demuestra que son más débiles que las mujeres", apuntó.

La líder del Partido de las Rubias insiste en que ésta es una formación con objetivos políticos serios y que no tiene intención de representar solamente a las rubias (una de cada cinco mujeres en Rusia).

"Uno de los principales puntos de nuestro programa es promover la pequeña empresa. Las mujeres rusas son más activas que los hombres a la hora de abrir tiendas o pequeños negocios. No obstante, en Rusia lo que prima son las grandes corporaciones", dijo.

Además, defienden la necesidad de incentivar que las mujeres con hijos puedan cursar estudios y promueven valores como la no violencia, el respeto a la tradición y la tolerancia.

"El próximo 31 de mayo celebraremos nuestro primer congreso y haremos público el programa electoral", adelantó.

Volóshinova aseguró que ya han recibido ofertas de colaboración de varios países, entre ellos Italia, por lo que se muestra optimista con respecto al futuro.

"Si conseguimos tener presencia en todo el país, en unos años seremos el principal partido opositor. La gente está cansada de políticos como Ziugánov (líder comunista) y Zhirinovski (nacionalista)", manifestó.

Y auguró que su partido llenará el vacío existente en el panorama político ruso desde el descalabro de los liberales en las elecciones de 2003.

"La gente desea una alternativa, aunque sea colorista. Muchos ven a los oficialistas de Rusia Unida como una encarnación del Partido Comunista de la Unión Soviética (PCUS)", subrayó.

Volóshinova, de 39 años, cree que su partido será bien recibido en las grandes ciudades y entre los jóvenes, que son los que albergan menos prejuicios hacia el otro sexo.

"En el campo ruso es donde las mujeres son peor tratadas. Quizás, por ello, es donde hay más rubias, ya que se tiñen para llamar más la atención", señaló.

El Partido de las Rubias espera reclutar hasta 50.000 militantes en los próximos meses -el mínimo necesario para ser registrado como fuerza política- y planea abrir oficinas en todas las regiones y provincias del país.

"Queremos que nos tomen en serio. Con un poco de suerte, podremos presentar a una mujer, guapa, lista y rubia, en los comicios presidenciales de 2012", dijo.