La actividad diplomática internacional intensifica en las últimas horas sus esfuerzos por llegar al fin de los combates entre el Ejército de Israel e Hizbulá en el Líbano, en la decimotercera jornada del conflicto que se desencadenó después de que la milicia chií capturara a dos militares israelíes el pasado 12 de julio. En una escala no anunciada previamente, la secretaria de Estado de EE UU, Condoleezza Rice, llegó ayer a Beirut, donde se reunió con el Gobierno libanés para explorar la posibilidad de alcanzar un alto el fuego entre ambas partes, informaron fuentes oficiales libanesas.

Posteriormente, ya en Israel, la secretaria de Estado, abogó desde Jerusalén por una "paz basada en principios sólidos" y en la resolución 1559 de la ONU.

En unas declaraciones al margen de la entrevista que mantuvo con su colega israelí, Tzipi Livni, Rice dijo que "la comunidad internacional puede progresar" hacia la resolución del actual conflicto siguiendo la citada resolución, que pide el despliegue del Ejército libanés en la frontera con Israel, y la retirada y desarme del grupo chíi Hizbulá.

Insistió en que "toda paz debe basarse en principios sólidos", siguiendo la línea de Estados Unidos de que un alto el fuego que no resuelva la situación de inestabilidad debida a Hizbulá no serviría de nada.

Asimismo declaró que EE UU está preocupado por la situación humanitaria y señaló que "tanto para el pueblo de Israel, como para el de Líbano o para los palestinos, éstos son tiempos difíciles". En última instancia, dijo, "la paz sólo podrá ser duradera en un Oriente Medio pacífico y democrático".

Conferencia de Roma

Por su parte, el Alto Representante para la Política Exterior y de Seguridad de la Unión Europea (UE), Javier Solana, señaló que varios países europeos están dispuestos a contribuir a una fuerza de paz para el Líbano, tras una reunión con el diputado libanés Saad Hariri, con quien analizó la situación en la región.

Solana resaltó la importancia que para lograrlo tendrá la conferencia internacional del próximo miércoles en Roma, en la que destacó tres asuntos básicos: el acuerdo político, la cuestión humanitaria y los elementos relativos a la seguridad.

La conferencia del llamado "Grupo del Líbano" -integrado por Francia, Reino Unido, Italia, Unión Europea, Estados Unidos, Egipto y Banco Mundial- fue convocada el pasado viernes por Condoleezza Rice, para avanzar en la búsqueda de una solución que frene el conflicto.

Por su parte, el primer ministro británico, Tony Blair, tras reunirse en Londres con el primer ministro iraquí, Nuri Al Maliki, anunció que el Reino Unido prepara "urgentemente" un plan para favorecer el alto el fuego entre Israel y la milicia libanesa chií Hizbulá. Blair y Maliki coincidieron en valorar que lo que está ocurriendo en Líbano es "una catástrofe"

El ministro español de Asuntos Exteriores, Miguel Angel Moratinos, manifestó que España apoya una eventual fuerza multinacional para lograr el cese del conflicto entre Israel y el Líbano, pero con la condición de que cuente con el respaldo del Consejo de Seguridad de la ONU.

Moratinos se reunió en Madrid con el jefe del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, con representantes de las Juventudes del Partido Laborista israelí y de las Juventudes palestinas de la guerrilla de Al Fatah.

El jefe de la diplomacia española confió en la Conferencia de mañana en Roma y espera que en ella haya una "señal clara" para el fin de las hostilidades, la vuelta a la negociación política y diplomática, y la concreción de compromisos humanitarios.

Por otra parte, el ministro israelí de Seguridad Interior, Avi Dichter, manifestó ayer que Israel dispone de un plan de acción contra Hizbulá, si bien no se ha decidido cuánto tiempo se prolongará la operación, que dependerá de la evolución en el terreno diplomático.

Compromiso

La UE y EE UU han respondido al llamamiento de urgencia lanzado por la ONU para recaudar 150 millones de dólares con el fin de invertirlos en ayuda humanitaria para Líbano.

La UE se compromete a aportar diez millones de euros, lo que permitirá repartir durante tres meses ayuda humanitaria entre esta población. Lo ha anunciado una representante de Finlandia, país que ejerce la presidencia de turno de la UE, durante el acto en el que la ONU lanzó la alarma.

Paralelamente a la aportación de la UE, la mayoría de los países europeos expresó su intención de ofrecer aportaciones bilaterales para la reconstrucción del Líbano, que superan todas ellas más del millón de euros.

Por su parte, el presidente de EE UU, George W. Bush, ha ordenado el envío de ayuda humanitaria que comenzará al Líbano el martes por vía marítima y en helicópteros. Este país aportará 30 millones de dólares.