Un organismo independiente de vigilancia de la Agencia Central de Inteligencia estadounidense (CIA) recomendó llevar a cabo procedimientos disciplinarios contra funcionarios actualmente retirados o en funciones que fallaron en las labores de inteligencia previas a los atentados del 11 de septiembre de 2001.
El director de la CIA, Porter Goss, ahora deberá decidir si se llevan a cabo procedimientos disciplinarios. Dichos procedimientos, llamados formalmente "consejo de rendición de cuentas", fueron recomendados por el inspector general de la CIA, John Helgerson.
Por el momento se desconoce qué personas fueron identificadas para dichos consejos en el informe altamente secreto de varios cientos de páginas, enviado al Congreso y de carácter secreto.
Después de una investigación de dos años sobre lo que pudo haber salido mal antes de los secuestros suicidas de aviones, personas cercanas al informe indicaron que Helgerson criticó a un grupo de funcionarios del más alto nivel del organismo. Entre ellos se encuentra el ex director de la CIA George Tenet, el ex director de los servicios clandestinos Jim Pavitt, y el ex jefe del centro de combate al terrorismo, Cofer Black.
