Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

perfil // essam el hadary

El abuelo del Mundial

El guardameta de Egipto se convirtió en el futbolista más longevo en jugar en una Copa del Mundo con 45 años y 161 días

// Mark Ralston

La selección de Egipto se fue del Mundial de Rusia con cero puntos en su casillero y perdiendo contra la flojísima Arabia Saudí en la última jornada. Ni siquiera el gol de Salah le sirvió para puntuar. Y es que el nivel del resto de la plantilla está muy por debajo del de un delantero del Liverpool que hasta tocado físicamente fue la referencia egipcia. Los del norte de África, que son la selección más laureada en su continente, no asomaban la cabeza por la Copa del Mundo desde Italia 90 y su paso en Rusia fue para olvidar. Sin embargo, Egipto ha firmado un récord que será poco menos que imposible de batir: el del jugador con más edad en disputar un partido del Mundial. Y es que, ya eliminados, Héctor Cúper ha dado la alternativa a Essam El Hadary, que se plantó bajo los palos con 45 años y 161 días. El Hadary le arrebató el récord al portero colombiano Faryd Mondragón, que en Brasil 2014 había jugado un encuentro con la selección cafetera a la edad de 43 años y tres días. Pero, además El Hadary firmó otro hito que seguramente nunca será superado, el de meta más longevo en detener un penalti. Con una parada de muchos reflejos y agilidad, se lo detuvo a Al Muwallad. La mala suerte quiso que le lanzasen otra pena máxima pocos minutos después. En esa ocasión ya no pudo hacer nada.

La edad de Essam El Hadary es de otros tiempos. Más de 45 años suena a jugador de fútbol de comienzos del siglo XX. Pero la verdad es que este mito absoluto del país de los faraones no jugó por un regalo del seleccionador, sino que al comienzo del torneo mundialista todo el mundo dudaba seriamente si él sería el portero titular o si por el contrario iba a ocupar esa posición Ahmed El Shenawy, el meta del Zamalek de El Cairo que disputó los dos primeros partidos.

Curiosamente, El Hadary está jugando para un club de Arabia Saudí, el Al-Taawoun FC de la primera división saudí. Es su segunda aventura en el extranjero tras la temporada 2008/09, en la que jugó para el Sion de Suiza. Allí ganó la copa del país helvético y generó un conflicto legal pues el gran club de su vida, el Al-Ahly Egipto -que pasa por ser la entidad africana más ganadora de toda la historia- llegó a acusarle ante la FIFA por incumplimiento de contrato. Tal era su entidad y el temor del Al-Ahly a perderlo.

Su historia futbolística comienza en las categorías inferiores del modesto Damietta Club. Llega a la primera plantilla en el año 1993 y logra el ascenso a la primera división de Egipto en la temporada 94/95. Su primera temporada en la máxima categoría de su país fue brillante y el Al-Ahly lo ficha en 1996. En su segunda campaña en el gigante de El Cairo se hizo con la titularidad e inició una carrera exitosa como pocas. Seguramente ningún futbolista africano pueda gozar de más títulos en su continente. Y es que en 12 años con el Al-Ahly, El Hadary sumó nueve ligas nacionales, cuatro copas y tres supercopas, pero, sobre todo, cuatro Ligas de Campeones de África, cuatro supercopas del continente negro y dos supercopas del mundo árabe. Y es que el ahora "abuelo" de los Mundiales fue la referencia en portería de uno de los clubes más ganadores del mundo y contribuyó con fuerza a seguir escribiendo la legendaria historia de los "Diablos Rojos" egipcios.

Además, con la nacional, y aunque hasta el lunes no pudo disputar un encuentro mundialista, Essam El Hadary fue internacional en más de 150 ocasiones, disputando numerosas veces la Copa Africana de Naciones, ganando las ediciones de 1998, 2006, 2008 y 2010. Fue elegido mejor portero del torneo saliendo subcampeón en la de 2017. Se trata de un palmarés internacional inigualable y solo posible gracias a liderar la portería del combinado hegemónico en África durante muchos años. A nivel de clubes, tras su paso por Suiza jugó en algunos de los mejores equipos egipcios y rivales del Al-Ahly. Entre ellos el Ismaily y el Zamalek.

El Hadary ya escribió su nombre en la historia de los mundiales y ese es un título honorífico que nadie podrá arrebatar a los faraones.

Compartir el artículo

stats