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Ver galería >La ciudad olívica ha amanecido hoy con una cara bien distinta a la habitual para un sábado por la mañana. Comercios cerrados y escasos vecinos pisando la calle tras el anuncio del estado de alarma por parte del Gobierno y de la situación de emergencia en el seno de la Xunta de Galicia.
La ciudad olívica ha amanecido hoy con una cara bien distinta a la habitual para un sábado por la mañana. Comercios cerrados y escasos vecinos pisando la calle tras el anuncio del estado de alarma por parte del Gobierno y de la situación de emergencia en el seno de la Xunta de Galicia.
La ciudad olívica ha amanecido hoy con una cara bien distinta a la habitual para un sábado por la mañana. Comercios cerrados y escasos vecinos pisando la calle tras el anuncio del estado de alarma por parte del Gobierno y de la situación de emergencia en el seno de la Xunta de Galicia.
La ciudad olívica ha amanecido hoy con una cara bien distinta a la habitual para un sábado por la mañana. Comercios cerrados y escasos vecinos pisando la calle tras el anuncio del estado de alarma por parte del Gobierno y de la situación de emergencia en el seno de la Xunta de Galicia.
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La ciudad olívica ha amanecido hoy con una cara bien distinta a la habitual para un sábado por la mañana. Comercios cerrados y escasos vecinos pisando la calle tras el anuncio del estado de alarma por parte del Gobierno y de la situación de emergencia en el seno de la Xunta de Galicia.
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José Lores / Alba Villar
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José Lores / Alba Villar
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