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Ver galería >La tradicional Danza de Espadas y Penlas, así como las coloridas alfombras florales del Corpus Christi, abarrotó ayer las calles del casco antiguo de Redondela durante toda la mañana para disfrutar del día grande de las Festas da Coca. A pesar de las nubes grises amenazantes con las que amaneció la jornada, la lluvia nunca hizo acto de presencia, incluso el sol lució a ratos, un tiempo perfecto para que mayores y niños participasen en los actos tanto religiosos como profanos. Los gigantes, cabezudos, diablillos y el “temible” dragón de la Coca amenizaron la jornada de los más pequeños.
R. Grobas
La tradicional Danza de Espadas y Penlas, así como las coloridas alfombras florales del Corpus Christi, abarrotó ayer las calles del casco antiguo de Redondela durante toda la mañana para disfrutar del día grande de las Festas da Coca. A pesar de las nubes grises amenazantes con las que amaneció la jornada, la lluvia nunca hizo acto de presencia, incluso el sol lució a ratos, un tiempo perfecto para que mayores y niños participasen en los actos tanto religiosos como profanos. Los gigantes, cabezudos, diablillos y el “temible” dragón de la Coca amenizaron la jornada de los más pequeños.
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La tradicional Danza de Espadas y Penlas, así como las coloridas alfombras florales del Corpus Christi, abarrotó ayer las calles del casco antiguo de Redondela durante toda la mañana para disfrutar del día grande de las Festas da Coca. A pesar de las nubes grises amenazantes con las que amaneció la jornada, la lluvia nunca hizo acto de presencia, incluso el sol lució a ratos, un tiempo perfecto para que mayores y niños participasen en los actos tanto religiosos como profanos. Los gigantes, cabezudos, diablillos y el “temible” dragón de la Coca amenizaron la jornada de los más pequeños.
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