A todos nos gusta viajar en veranopara disfrutar del buen tiempo y desconectar de la rutina. Por ello, julio y agosto son los meses con el mayor número de desplazamientos en coche en España. De hecho, en 2021, año todavía marcado por las restricciones derivadas de la pandemia, nueve de cada diez españoles optaron por el coche como medio de transporte para moverse durante sus vacaciones, y más de la mitad de ellos (59%) lo hicieron en familia.

Y es que no es de extrañar, puesto que el coche tiene infinitas ventajas frente a otros medios de transporte: es un medio privado, cómodo, sin horarios marcados e independiente. Además, siempre ha sido más económico que viajar en avión, tomar un crucero, comprar varios billetes de tren, etc. No obstante, el increíble aumento de los precios del combustible ha hecho que muchos conductores se cuestionen si el coche sigue siendo la mejor opción para viajar este verano. La respuesta es: sí.

Hace tan sólo doce meses el precio medio de la gasolina era de 1,351 euros el litro y el del diésel era de 1,212 euros el litro. Asimismo, la recarga en una estación de carga continua de 50 kW era también más barata. Estas cifras se alejan mucho de la cuantía que pagamos actualmente en las gasolineras. Ahora, el combustible se ha encarecido aproximadamente un 30% y la electricidad un 25%.

De hecho, el precio de la gasolina alcanzó a mediados de junio un nuevo máximo históriconuevo máximo histórico. Según los datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea, la gasolina se vendía en ese momento a un precio medio de 1,917 euros y el gasóleo a 1,803 euros, incluyendo la bonificación pública de 20 céntimos por litro.

Con estos datos, coches.com ha calculado el gasto medio de un recorrido de 1.000 kilómetros en coche, así como un viaje en coche eléctrico, y ha obtenido un precio medio de unos 105 euros cada 1.000 kilómetros. Lógicamente, dicha cifra variará en función del consumo del vehículo.

En definitiva, la conclusión del estudio es muy clara: el coche continúa siendo rentable y competitivo frente a otros medios de transporte como el tren, el barco o el avión. A pesar del incremento de los precios del combustible y la electricidad, viajar en coche sigue siendo la opción más económica, sobre todo si se hace en familia o con un grupo de amigos.

Así de competitivo es el coche frente a otros medios de transporte:

¿Puede cambiar la situación?

Si los precios del combustible siguen creciendo, todos los medios de transporte se verán afectados, no sólo los vehículos. Es más, cabe destacar que desde marzo de 2021 el precio del combustible para los aviones ha aumentado un 106% y un avión consume entre 350 y 450 litros cada 100 kilómetros.

El único medio de transporte que posiblemente pueda reducir su precio es el tren de alta velocidad, ya que los operadores tienen que pagar a Adif, la sociedad propietaria de la infraestructura, un alto canon para usarla, lo que impide la entrada de otros operadores y permitiría la reducción de los precios.