En los meses de verano los desplazamientos por carretera se incrementan de forma considerable. En julio y agosto la Dirección General de Tráfico incrementa sus campañas para tratar de reducir la siniestralidad y garantizar la seguridad de los conductores.

El control de la velocidad es una de las principales preocupaciones de los agentes de Tráfico y para ello, las carreteras españolas cuentan un total de 780 radares fijos y 545 radares móviles. Estos últimos, se pueden encontrar en varios sitios como en los drones, en las furgonetas o motos camufladas conducidas por agentes de la Guardia Civil de Tráfico e incluso en vehículos camuflados que despistan a los conductores.

Tráfico cuenta también con 23 drones y diez helicópteros equipados con las cámaras MX15 para vigilar que todos los conductores respetan correctamente la Ley de Seguridad Vial. Dispositivos que son prácticamente imperceptibles a ojos de los conductores pero no lo son los coches. De hecho, la DGT ha dado a conocer cuales son los dos nuevos vehículos con los que operará este verano.

Como vehículo camuflado, se emplean de forma muy habitual es el Seat Exeo de color azul y como vehículo rotulado de la DGT dotado de radar móvil nos encontramos con el Alfa Romeo Stelvio

Las multas por exceso de velocidad, el organismo avisa de que pueden ir desde los 100 a los 600 euros y además, conlleva la retirada de entre 2 y 6 puntos en el carné de conducir.