El alcalde de Vilagarcía, Javier Gago López, ha hecho un llamamiento a la serenidad y el sentido común para evitar que vuelvan a reproducirse altercados como el ocurrido el pasado fin de semana en la zona lúdica de la TIR portuaria, que llevó al hospital a dos jóvenes, uno de ellos con heridas y golpes de consideración. Advirtió que está dispuesto a exigir el estricto cumplimiento de los horarios de cierre de pubs, de continuar los incidentes.

"O todos somos capaces de aplicar el sentido común en estos temas, o seremos responsables de respuestas y actitudes que no deseamos. No puede más que preocuparme lo que se está diciendo de la posibilidad de venganza, del ojo por ojo. Hay que pedir justicia, no venganza", manifestó el alcalde.

Que actúe la Justicia

Gago puntualizó que se puede entender que se hable desde la emotividad, pero hizo un llamamiento a sosegar los ánimos. "Hay que esperar a que los Tribunales de Justicia actúen también de manera tan diligente como lo hace la Policía en el esclarecimiento de este suceso".

"Por enésima vez digo que no voy a convertir la ciudad en un Gran Hermano, ni voy a tomar la ciudad con la policía. Esto se resuelve con más educación, más respeto a los demás y más atención a las normas de convivencia. No voy a criminalizar a los jóvenes ni a la movida. Los que hacen este tipo de agresiones, están identificados y ya sabemos quienes son", expuso el regidor municipal.

Llamamiento a hosteleros

También se dirigió a los hosteleros haciendo un llamamiento para que, dentro de sus posibilidades, tomen medidas como por ejemplo hacer uso del derecho de admisión o negarse a servir consumiciones a quienes (ya son conocidos por todos) suelen actuar de forma violenta tras tomar unas copas.

Sus declaraciones las argumenta apoyándose en una sentencia del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, TSXG, del 6 de mayo de 2002, que hace referencia a que los titulares de este tipo de negocios tienen la obligación del cierre de locales, de no permitir que los clientes saquen copas a la vía pública y además también son responsables del mantenimiento del orden público.

"Además de necesidad de más educación, hay un problema de consumo de alcohol y demasiado tiempo en la calle. Si se continúa así, hay otra medida que se pondrá en práctica. Es la de exigir el estricto cumplimiento de los horarios de cierre de los locales, o sea, hacer que la ley se cumpla. Esto no puede extrañar a nadie", expresó Gago López.

El caso de O Con

El alcalde vilagarciano recordó que una situación similar se produjo hace años en la zona próxima al río de O Con, donde se producían altercados por culpa de la movida. El problema se acabó cuando se empezaron a tomar medidas estrictas de control sobre los locales. Al final la mayor parte de estos establecimientos terminaron cerrando sus puertas. "En la zona de O Con, quienes más tenían que perder, no hicieron nada para colaborar en la solución de los conflictos y, al final, acabaron perdiendo", expuso.