Los vecinos de O Marco y Lusquiños, en la parroquia de Tomeza, retomarán mañana las movilizaciones para protestar por el "desinterés y desprecio" que a su parecer ha mostrado por el concello por concluir la red de saneamiento en esta zona, y que ha dejado desatendida a una treintena de viviendas. Los afectados, un centenar de vecinos, han instalado en el puente de O Marco una pancarta de protesta, en la que se demanda al alcalde de Pontevedra "menos desprecio" y recuerdan que "necesitamos conectar la red del alcantarillado".

Medidas contundentes

Las protestas se retoman con una concentración de vecinos en este mismo puente, que se celebrará mañana desde las 19.30 horas. Llevarán el problema ante la Consellería de Sanidade y están dispuestos a denunciar al gobierno local si no ofrece soluciones urgentes.

Tampoco descartan acciones de protesta más contundentes, como cortes de tráfico en la carretera de Tomeza, para que la denuncia tenga más repercusión, así como una concentración ante el ayuntamiento.

La falta de saneamiento en estos núcleos provoca que las fosas sépticas de la zona rebosen y las aguas fecales lleguen a los caminos y en ocasiones al propio río. Explican que los pozos negros están desde hace mucho tiempo saturados, y además de contaminación provocan malos olores y presencia de parásitos.

Los afectados aseguran que hace dos años iniciaron conversaciones con los responsables municipales y con los técnicos de la empresa Aquagest para abordar una solución a este problema, sin que por el momento se haya hecho nada por solventarlo, y a pesar de que ya cuentan con todos los permisos necesarios para instalar el saneamiento.

Además, en una reciente reforma de la carretera se instalaron las conexiones necesarias para la red de saneamiento que nunca llegó. Las viviendas han realizado también las obras precisas para enganchar el alcantarillado, pero no pueden hacerlo.