Los test de estabilidad serán obligados para toda la flota de más de 12 metros

Marina Mercante asume la recomendación de la Ciaim por el siniestro del «Sempre Güeto», que conllevará un cambio legal, y formará a inspectores para detectar reformas no validadas

El «Sempre Güeto», reflotado tras el naufragio en el puerto exterior de Ferrol.

El «Sempre Güeto», reflotado tras el naufragio en el puerto exterior de Ferrol. / Ciaim

Lara Graña

Lara Graña

El Sempre Güeto, un cerquero de 22 metros de eslora, no solo salió de las instalaciones de Astilleros Piñeiro, en 2003, con otro nombre en el casco: San Xiao Primero. Tenía también entonces otra estructura, que fue modificada sin autorización tras el cambio de propietario en algún momento después del año 2016.

Ganó mucho peso –elevó la amura en la estampa de popa y el disco de fancobordo quedó literalmente por debajo de la altura de la mar– y no aumentó el tamaño de las puertas de desagüe, y lo hizo con el exclusivo objetivo de “albergar artes [de pesca] de mayores dimensiones”.

Su estabilidad era «precaria» y ese fue el motivo por el que volcó el 17 de junio de 2021: fallecieron dos de sus 10 tripulantes. La Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes Marítimos (Ciaim) emitió un durísimo informe que provocará un cambio legal, porque todos los pesqueros de entre 12 y 24 metros de eslora quedarán obligados a la realización de una «experiencia de estabilidad» cada diez años, hayan realizado o no modificaciones estructurales.

Así consta en el informe de actividad de la Ciaim del ejercicio 2023, emitido este miércoles. Una de las recomendaciones emitidas tras analizar las causas del naufragio del Sempre Güeto, dirigida a la Dirección General de la Marina Mercante, era «que modifique el Real Decreto 543/2007» para que sean preceptivos estos test de estabilidad periódicos que, a día de hoy, solo tienen que pasar los pesqueros que superen los 24 metros.

Marina Mercante ha aceptado este consejo; el cambio está «en curso». Eso sí, la Ciaim, en el mismo informe sobre este siniestro, lanzó una severa crítica a los inspectores de Capitanía Marítima de A Coruña, al entender que no actuaron con diligencia a la hora de validar la salida a la mar del pesquero. Los cambios sin autorizar en la estructura del buque eran muy evidentes, así como la precaria estabilidad, y el armador nunca fue apercibido.

Por eso Marina Mercante ha aceptado otra de sus recomendaciones, en este caso para realizar «una acción formativa específica dirigida a los inspectores» para que revisen la instalación de grúas, incrementos de las amuradas o cualquier elemento que facilite la «detección de cambios de equipos y reformas no autorizadas».

El hecho de que se atiendan las sugerencias de la Ciaim, que es un organismo sin capacidad de sanción, no es lo habitual. De las 46 recomendaciones que emitió en el ejercicio 2023, de hecho, treinta fueron rechazadas o no fueron respondidas por sus interlocutores, ya sea administraciones públicas o armadoras.

Expedición al «Pitanxo» con información «valiosa»

En la misión de búsqueda, localización e inspección del pecio del Villa de Pitanxo participaron tres miembros de la Ciaim: dos actuaron como peritos judiciales —emitieron ya su informe a la Audiencia Nacional— y otro en representación de la propia entidad de investigación.

Imagen del «Pitanxo» tomada con el sónar de barrido lateral. |  Ciaim

Imagen del «Pitanxo» tomada con el sónar de barrido lateral. / Ciaim

El estudio final será divulgado previsiblemente en las próximas semanas, según estiman las partes personadas en el procedimiento. En el informe de actividad de 2023 de la Ciaim consta una pequeña referencia a esta misión, que arrojó «información valiosa para la investigación en curso».El documento ha difundido una imagen tomada con el sónar de barrido lateral del buque offshore Ártabro, que fue la que permitió localizar los restos del pesquero en el que fallecieron 21 de los 24 tripulantes.

«India»: dos fechas distintas expedidas en A Coruña

El India era una embarcación de recreo de 8,3 metros que operaba en Ibiza y que, casi en la medianoche del 17 de agosto de 2021, colisionó contra el ferri Formentera Direct, de 43,5 metros de eslora. Uno de los dos tripulantes del India falleció.

Estado en el que quedó el barco recreativo «India». |  Ciaim

Estado en el que quedó el barco recreativo «India». / Ciaim

Aunque operaba en las Baleares, el pequeño yate había recibido el certificado de navegabilidad en A Coruña. Durante la investigación de la Ciaim afloraron dos documentos con distintas fechas de revisión del barco: en uno se decía que la había pasado un mes antes del siniestro; en el otro, que se había realizado en julio de 2019.

«A la vista de los indicios de falsedad documental», la Ciaim ha emplazado a la Dirección General de la Marina Mercante a que investigue esta situación.

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