El "Ártabro" marca como punto de búsqueda la posible localización del "Pitanxo"

El Ártabro navega desde hace unas 36 horas a casi cuatro nudos de velocidad. Lo hace abarcando unas seis millas de cada vez, de norte a sur y de oeste a este, con el objetivo de abarcar 25 kilómetros cuadrados cada jornada. Buscar los restos del pesquero Villa de Pitanxo, de 50 metros de eslora y 10 de manga, no es tarea sencilla en la inmensidad de los Grandes Bancos de Terranova.

Utiliza en este proceso una sonda de barrido lateral, con la que lanza pulsos ultrasónicos que rebotan en el fondo marino y arrojan una recreación de elementos que yacen en él. Hay muchos posibles --restos de otros barcos, puertas de arrastre perdidas, protuberancias naturales...--, y los tiene que ir descartando hasta dar con el pecio.

Misión “Pitanxo”: una insólita luz en las tinieblas

Desde la mañana de este domingo, el buque offshore contratado por el Ministerio de Transportes para la búsqueda, localización e inspección del Pitanxo ha peinado ya en torno más de 40 kilómetros cuadrados de superficie. Pero es verdad que no ha mantenido un ritmo constante: esta pasada madrugada estuvo detenido en el mismo punto durante más de cuatro horas. En las siguientes coordenadas aproximadas: latitud 46º 49 87' N y longitud 046º 36,5 96' W. Es un punto de interés, lo que se denomina un spot.

Esta ubicación está próxima a la de la última señal de la radiobaliza y la caja azul (latitud 46ª 49 85N y longitud 046º 40 67'W), antes de que al buque de Pesquerías Nores Marín se lo tragase el océano con 24 personas a bordo. Solo sobrevivieron tres: el patrón, Juan Padín, su sobrino Eduardo Rial y el marinero Samuel Kwesi Koufie. Ahora bien, el hecho de que la radiobaliza sí se hubiese activado no significa que el Pitanxo está justo debajo de esas coordenadas en concreto: es preciso tener en cuenta tanto la denominada curva loxodrómica –el planeta tierra es redondo– como el modo en que el pesquero se hundió y las corrientes. No se sabe, además, si la estructura se partió tras quedar por debajo del agua.

"Ártabro" y "Triton", la misión de la esperanza para los 21 del "Pitanxo"

No ha trascendido si ya ha bajado uno de los dos ROV Triton que lleva a bordo a este spot; la empresa contratada, tiene por contrato una cláusula de confidencialidad. Toda la investigación de las causas del naufragio está judicializada en el juzgado de Instrucción número 2 de la Audiencia Nacional.

Gracias a su equipamiento de posicionamiento dinámico --un sistema informatizado que mantiene al buque en un lugar fijo y estable, mediante sensores y estabilizadores giroscópicos, que envían señales a las hélices--, el Ártabro se mantuvo en estas coordenadas entre las 04:30 horas UTC y las 09:00 horas UTC. No lo había hecho hasta ahora, como muestra su señal satelital AIS (sistema de identificación automática o Automatic Identification System).

Cuando se descarten los spots que no se correspondan con el Pitanxo, el ROV tomará imágenes del casco, las cubiertas, maquinillas, carreteles, suspiros de tanques, aberturas, soportes de balsas salvavidas y la radiobaliza. También de las puertas y tambuchos –si quedaron trincadas o reventaron por la presión al hundirse–, los imbornales y demás sistemas pasivos de desagüe. La clave, en todo caso, estará en el aparejo, y por eso se ha encomendado a este equipo la grabación del lecho marino por la ruta por la que estuvo siendo arrastrada la red desde las 02:00 horas UTC del día 15 de febrero de 2022 hasta el punto en el que se asienta el pecio.

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