El Gobierno abaratará el combustible en el mar con hasta 300.000 euros por barco

El sector del mar durmió ayer algo más aliviado –en cuanto a ayudas al combustible se refiere– aunque con dudas sobre cómo se aplicará el nuevo apoyo anunciado ayer por el Gobierno central. Según la Referencia del Consejo de Ministros, publicada a última hora de la tarde, se establecerá una ayuda directa a los pesqueros en función del caladero (nacional o internacional), la modalidad y la eslora del barco, que irá desde 1.100 euros hasta 300.000 euros por barco, desplegándose –como comunicaba poco antes el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación– un total de 120 millones que se repartirán contemplando también “la estimación del consumo de gasóleo de la embarcación”. Todo ello para cubrir los costes adicionales derivados del aumento del precio del carburante marítimo.

La estimación implícita en dicha medida, que será este miércoles plasmada en el último Real Decreto-ley para atajar –entre otras cosas– “las consecuencias económicas y sociales de la guerra en Ucrania”, se efectuará a partir de los datos de consumo de gasóleo de la flota pesquera de la última Encuesta Económica de Pesca Marítima. En este contexto, el departamento que dirige Luis Planas estima que un cómputo de 8.900 buques pesqueros –la mitad son gallegos– se verán favorecidos y, evidenciando que el coste del carburante supone en torno al 30 % de los gastos de producción en este sector, hace hincapié en que el mismo también se beneficiará –“por otros seis meses más”– de la exención de las tasas pesqueras, que le supondrá un ahorro de aproximadamente 500.000 euros.

Expectante se mostró, entre diferentes entidades, la Confederación Española de Pesca (Cepesca), que valoró el mantenimiento de ayudas a los carburantes –que cambia respecto al descuento de 20 céntimos por litro que había previamente, desde abril, en surtidor– si bien remarcó que aún ha de “estudiar en profundidad el paquete de 120 millones”. Al respecto se remitió a las declaraciones hechas hace unos días por su secretario general, Javier Garat, quien subrayó que el descuento es imprescindible “para no ahogar a buena parte de la flota de bajura y altura, duramente castigada”.

Galicia necesita el descuento

Edelmiro Ulloa, director gerente de la Cooperativa de Armadores de Vigo (ARVI), trasladó por su parte, en declaraciones a FARO, esa misma prudencia. “Se han establecido una serie de ayudas que vamos a ver cómo se articulan. Están muy bien los 120 millones que ponen, pero si esas ayudas después no son capaz de articularlas porque las condiciones que ponen son imposibles… Ahí se quedan, en un simple anuncio y nada más”, dijo, señalando que hay que apoyar a la flota para que no se quede “por el camino” pues es la garante de “la sostenibilidad y la soberanía alimentaria”.

En la misma línea que sus compañeros, el vigués Iván López van der Veen, presidente de la Alianza Europea de la Pesca de Fondo (EFBA), manifestó también a este periódico que “es fundamental que se mantengan las ayudas a la pesca en el combustible”. “La flota española es un actor global y como tal tiene a flotas como la china entre sus competidores. Era necesario poder mantener una cierta competitividad de costes para mantener la viabilidad de una flota sostenible como la nuestra ante actores que no lo son tanto”, apostilló.

Desde el norte de la comunidad autónoma también se pronunciaron Sergio López, gerente de la Organización de Productores pesqueros de Lugo (OPP-7) y Basilio Otero, presidente de la Federación Provincial de Cofradías de Pescadores de Lugo y de la Federación Nacional de Cofradías de Pescadores. Ambos evidenciaron que aguardan conocer con más detalle la nueva medida y, especialmente, ver cómo se aplica: “La pesca es una actividad que hoy sin el incentivo al coste de combustible, que es uno de los inputs que más representan –se supone que a partir de 60 céntimos por litro la mayoría de barcos operaría en pérdidas– dentro de la empresa, tiene una viabilidad muy complicada”.

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