“Impulsar una organización profesional en la que todos los socios tomaran las decisiones de forma conjunta para el desarrollo económico y social de su mar y de su tierra”. Ese fue el sueño inicial de la Organización de Palangreros Guardeses (Orpagu), que el próximo 1 de diciembre hará realidad otro. Tras meses y meses de trabajo inaugurará su planta frigorífica 4.0 en Tui (Pontevedra), entremezclando tradición e innovación en un amplio espacio de 7.000 metros cuadrados con capacidad para 3.000 toneladas de pescado congelado. Estas instalaciones, que serán presentadas en sociedad en tan solo cuatro días, se estrenarán entre finales de 2022 y principios de 2023 con al menos 500.000 kilogramos de tintorera (también conocida como tiburón azul) y pez espada: una cantidad que su flota traerá desde tres regiones oceánicas (Pacífico, Atlántico Sur e Índico) y que podrá aumentar en función de lo que sus barcos descarguen esas jornadas.
En la futurista nave de Orpagu –que cuenta con un sistema de descarga y clasificación de pescado diseñado ad-hoc para la organización por el Centro Tecnológico de Automoción de Galicia en colaboración con la empresa Josmar– ya están operativas las oficinas de administración y el departamento comercial. Con la vista puesta en maximizar su rendimiento, el objetivo que persiguen los palangreros guardeses es estar utilizando el 80% de su capacidad de almacenaje en el primer trimestre del próximo año.
La planta inteligente –que también podrá ser utilizada por empresas externas a la mencionada asociación– busca minimizar la huella de carbono, ser un modelo de eficiencia energética y plantea un sistema que permite “armonizar” los puestos laborales dirigidos a manipular las especies que captura la flota de la entidad, con ejemplares que en determinados casos pesan más de 100 kilos. Conservando una treintena de profesionales, que en los mayores momentos de actividad aumentarán hasta los 45, los empleados experimentarán en su propia piel la evolución tecnológica, viendo cómo cambian sus funciones. Por ejemplo, pasando de cargar el pescado a reorientarlo y centrarse en tareas más técnicas.
Orpagu bautizará así, al fin, un proyecto en el que ha invertido nada menos que ocho millones de euros. La nave frigorífica del Polígono Industrial Areas, que será inaugurada el jueves que viene, contará con la presencia de diversas autoridades en su nacimiento. Entre ellas, el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, así como los alcaldes de A Guarda y Tui.
En este evento, los palangreros guardeses, líderes en palangre de superficie a nivel europeo, cosecharán un nuevo hito al convertirse en la primera organización del sector en cerrar el círculo de sus capturas: desde la extracción a la recepción, clasificado, almacenamiento y distribución de las especies que pescan sus 79 barcos (40 de ellos españoles y 39 de nacionalidad portuguesa).
Pioneros “a la japonesa”
La operatividad del citado sistema permitirá, asimismo, innovar en procesos como el de despiece del pescado, apostando por el ronqueo: una técnica que en España sólo se utiliza para el despiece del atún rojo, basada en una tradición milenaria que permite el aprovechamiento de absolutamente toda la pieza de pescado. En este caso, Orpagu lo hará con el pez espada, siendo la primera entidad en todo el país en llevar a la práctica con dicha especie este famoso método japonés.
Por otra parte, la planta contará con una sala de I+D que permitirá seguir trabajando en nuevas elaboraciones, en línea con los productos por los que apuesta la organización: “Formatos atractivos, platos fáciles de preparar y productos de gran calidad”. Como ejemplo, los palangreros guardeses destacan las Delicias de Anzuelo que “triunfan en el mercado internacional” al suponer más del 40% de las ventas en países como Estados Unidos, Dinamarca, Suiza, Holanda o Portugal.
La buena noticia de la inauguración se suma a las distinciones concedidas esta misma semana por la Zona Franca de Vigo, al reconocer a Orpagu como “Empresa de Alta Productividad” y “Empresa Gacela 2022”. El primer reconocimiento viene por presentar durante tres años consecutivos un valor añadido por persona empleada por encima del percentil 75 del sector pesquero y una tasa de crecimiento superior al 10% cada año. Mientras que del segundo se hace acreedora la organización por presentar una tasa de crecimiento “elevada y constante en su cifra de ingresos, por encima del 25% durante tres años consecutivos”.
La Organización de Palangreros Guardeses cierra, con dicha planta, el círculo: pero no lo hace como el final del camino iniciado hace 26 años, sino como un momento para coger impulso y, manteniendo sus valores fundacionales, seguir apostando por el desarrollo armónico de la pesca en la costa guardesa: “En la nave de Orpagu cabe toda la sociedad de A Guarda”.
Exoesqueletos para 2023
El proyecto de automatización de procesos en la pesca –en el que se integra la planta– cuenta con tres partes. La primera y ya expuesta, cuyas últimas conclusiones fueron presentadas el pasado mes de octubre en la que fue la primera participación de Orpagu (contando con stand propio) en Conxemar, incluyó un estudio en el que se creó un “gemelo virtual” del proceso de descarga y clasificación en la nave frigorífica sobre la que se probaron diferentes alternativas de semiautomatizado.
Ahora se analizan los procesos de pelado del pescado y la manipulación de ejemplares con exoesqueletos adaptados a las necesidades concretas de los empleados ligados a esta entidad. Quizá estos últimos artefactos son lo que más curiosidad generen. Se espera que lleguen a mediados del año que viene y la idea es extenderlos a toda la flota para reducir la carga física que se concentra en la zona lumbar y los hombros.
