El Parlamento Europeo (PE) ha movido ficha por la flota pesquera gallega que faena en aguas de Malvinas. En una extensa resolución aprobada este mes los europarlamentarios han demandado una serie de cambios en torno al “futuro de la pesca” tras la retirada de Reino Unido de la Unión Europea (UE). En el documento, de 12 páginas, el PE ha demandado “eliminar los aranceles a la importación de calamar” capturado en aguas del archipiélago, es decir, de la especie Loligo gahi. Para ello, apelan a que tanto el Consejo como la propia Comisión Europea tomen “todas las medidas necesarias”.
En concreto, la resolución adoptada por el PE tiene que ver con el “Futuro de la pesca en el canal de la Mancha, el mar del Norte, el mar de Irlanda y el océano Atlántico” y responde a las múltiples problemáticas detectadas en torno al sector tras el Brexit. Malvinas, como territorio de ultramar bajo dominio de la Corona británica, no formó parte del acuerdo de comercio al que llegaron en las Navidades de 2020 los negociadores de Londres y Bruselas, por lo que desde 2021 se establecieron aranceles para aquellas especies que llegaban de estas zonas geográficas.
La que afectaba a Galicia, tanto por la cantidad como por el valor que genera, es la del calamar Loligo. Un total de 16 buques con base en Vigo faenan en estas aguas el archipiélago situado en el Atlántico suroeste en dos campañas cada año capturando la especie, que en su inmensa mayoría llega a la UE a través del puerto de Vigo.
El contingente de calamar sin arancel es de 75.000 toneladas
Desde que se aprobó el acuerdo, las armadoras se ven sometidas al pago de este arancel. Por este motivo, se intentó encontrar una solución a través de la inclusión de un contingente arancelario autónomo (ATQ en inglés) sobre el calamar Loligo. Y pese a que la cantidad era satisfactoria para cubrir las capturas de la flota, 75.000 toneladas, la letra pequeña (en alusión a su destino únicamente para transformación) impedía un uso real, por lo que tan solo se utilizó un 2% del total de la cantidad.
Mientras los armadores se mueven para intentar hacer más útil este contingente y solucionar así la papeleta, los europarlamentarios recomiendan directamente suprimir el arancel. A raíz de enmiendas incluidas por el Partido Popular, el artículo 39 de la resolución adoptada “pide a la Comisión y al Consejo que tomen todas las medidas necesarias para eliminar los aranceles a la importación de calamar patagónico (Loligo gahi)”.
A la espera de que o bien fructifique este plan de la Eurocámara o las gestiones para modificar esta letra pequeña de los ATQ, la flota continúa trabajan en Malvinas. A tres días de concluir la primera campaña (lo hará este sábado), los buques superarán las 50.000 toneladas, lo que supone una media de capturas con las que ya se podría dar por bueno todo el año. Según el Departamento de Pesquerías del Gobierno isleño, en lo que va de año la flota capturó un total de 48.542, aunque la cuenta está a día del martes de la semana pasada, con lo que la cifra ya se habrá superado.
