El Ministerio de Agricultura, pesca y Alimentación deja en manos de Bruselas la posible solución para la flota pesquera ante el alza del precio del gasóleo. Pese a que los amarres ya han comenzado ante la imposibilidad de llevar a cabo la actividad de forma rentable (como la flota de cerco en Vigo), el Ministerio emplazó al sector a una reunión para el próximo martes para “abordar posibles soluciones” y llevará el asunto al consejo de ministros de Agricultura de la UE que se celebrará el 21 de marzo.

El ministro del área, Luis Planas, se pronunció el miércoles en el congreso sobre este problema. “Creemos que la Comisión debe mojarse al respecto”, apuntó el valenciano, que centró más su intervención en destacar los problemas habituales del sector (como la persecución del arrastre o la falta de relevo generacional) que en la crisis actual del gasoil.

El sector, por su parte, sigue demandando medidas urgentes ante el amarre general que se avecina a medida que buques como los de Gran Sol finalicen sus mareas.