La flota alerta de una tormenta perfecta: Brexit, eólica y áreas protegidas
“Los pescadores no tendrían ningún lugar para pescar”, lamentan desde la patronal Europêche

Un arrastrero de Gran Sol con base en Vigo. | // PABLO HERNÁNDEZ / A. A.
A. A.
La flota de altura y gran altura lleva se ve cada vez más amenazada por una tormenta perfecta que, con cada año que pasa, suma nuevas catástrofes a la lista. Especialmente en estos últimos dos años. En un debate telemático, la patronal comunitaria del sector, Europêche, alertó de que “el efecto combinado” de situaciones como el Brexit, la expansión de los parques eólicos marinos o la intención de ampliar las áreas marinas protegidas para que ocupen el 30% de mar dejarán a la industria en el alambre. “Los pescadores no tendrían ningún lugar para pescar”, lamentó el presidente, el español Javier Garat.
El andaluz intervino en el webinar “Desafíos y oportunidades para la pesca a gran escala”, presentado por la eurodiputada vasca Izaskun Bilbao y el danés Søren Gade e impulsado por el grupo Renew Europe. Para Garat, la tormenta perfecta se sumar a unas “políticas pesqueras inviables” y a unas “regulaciones ambientales más estrictas” por parte de la Unión Europea. Todo ello “podría restringir el acceso a los caladeros tradicionales” de la flota hasta ese punto de estrangulamiento que teme Europêche para la actividad de los buques comunitarios.
Suscríbete para seguir leyendo
- La despedida de Ion Aramendi en 'Reacción en cadena': «Gracias por todo»
- «Aunque mi padre no esté, sé que estaría orgulloso de que su hijo vaya a tocar en Vigo»
- Iker Casillas anuncia acciones legales tras salir a la luz sus conversaciones subidas de tono con Claudia Bavel: «Que la justicia determine»
- Encuentran al joven chileno con familia en Mos desaparecido hace dos meses en A Coruña
- Una profesora es expulsada de un instituto de Vigo por acoso al claustro
- «Nadie cuestiona que una persona con hipertensión se medique, pero sí que lo haga una con depresión»
- Aparecen decenas de libros desperdigados en una céntrica calle de Vigo: «Non o podo entender»
- Portazo al trabajo por la tarde