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Un retraso en el teléfono del 061, clave en la muerte de un marinero en Ons

La Comisión de Investigación de Accidentes Marítimos cifra en siete los minutos que tardó el servicio de emergencias en atender una llamada de Salvamento Marítimo

El marinero fallecido viajaba a bordo del barco ‘Novo Cristo da Laxe’. | // FDV

Son las 21.30 horas del día 22 de octubre de 2019. El barco pesquero Novo Cristo da Laxe se encuentra a escasas millas de la punta sur de la isla de Ons. El capitán avisa por megafonía a sus seis marineros: es hora de hacer la segunda maniobra de lance de arte del día. A pesar de que la noche ha llegado hace horas, la visibilidad es buena. El viento también acompaña y apenas pasa de los 16 nudos. La embarcación no supera los siete.

En menos de cinco minutos, los marineros ya están listos para la operación y comienzan el lance. Todo acontece con normalidad. La red ya ha empezado a tocar al agua y 31 de las 36 anillas que la conforman han salido de la embarcación. El capitán del Novo Cristo da Laxe está completando el giro que cerrará el cerco de jareta. Tras una zozobra inesperada, un joven marinero de 24 años situado a babor pierde el equilibrio y se tropieza con una de las últimas cuatro anillas de la red que quedan por salir. La punta de la bota se le ha enredado con uno de los cabos que se dirige al agua. Con la inercia de la red, el marinero sale arrastrado hacia la popa del barco, se golpea fuertemente la cabeza contra la amurada y cae al agua.

En apenas unos segundos, sus compañeros gritan “hombre al agua” para alertar al capitán. Mientras el patrón aborta la maniobra y solicita ayuda a los pesqueros que faenan en la zona, otro marinero se lanza al agua para tratar de salvar a su compañero. Los barcos que acuden a la señal de socorro se acercan e iluminan la zona donde creen que ha caído el accidentado. Nadie ve nada. Los tripulantes del Novo Cristo da Laxe deciden halar la red y tras casi 15 metros de red izada, aparece el tripulante enganchado en la redes: ha pasado un total de cinco minutos en el agua. El accidentado tiene una herida en la frente, está inconsciente, pero todavía tiene pulso. Sus compañeros se turnan para hacerle maniobras de reanimación.

A las 21.44 horas, un minuto antes de que la persona herida esté a bordo, un barco de salvamento y otro de la Guardia Civil avisan de que van de camino a la posición del Novo Cristo da Laxe. A esa hora, el helicóptero de salvamento también se ha movilizado. Tres minutos después, el barco de salvamento marítimo Finisterre avisa al servicio de Urxencias Sanitarias de Galicia 061 que recomiendan que tras la maniobra de evacuación, trasladen de inmediato al herido al Hospital Álvaro Cunqueiro en Vigo. Algo más de media hora después, el helicóptero de salvamento confirma que ya ha evacuado al marinero y que se dirige al hospital. Entretanto, el barco de salvamento trata de avisar al servicio de Urxencias Sanitarias de Galicia 061 de la hora de llegada de la víctima. Nadie coge el teléfono. Tras siete minutos de intentos frustrados, el barco de salvamento Finisterre consigue contactar con el 061. Tres minutos más tarde, el helicóptero aterriza en el Álvaro Cunqueiro, pero no hay personal sanitario para efectuar el traslado del tripulante. El barco de salvamento vuelve a llamar al 061 y tras dos minutos, llegan los médicos. A pesar de los esfuerzos de los sanitarios, el tripulante fallece veinte minutos después.

Informe de la Comisión de Accidentes

Este es el relato que se desprende del informe exhaustivo de la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes Marítimos (CIAIM) que considera que, a pesar de señalar las demoras, no se puede “valorar si dicho retraso tuvo incidencia en el desenlace del accidente”. Aunque el CIAIM asegura que tras lo sucedido, Urxencias Sanitarias de Galicia 061 “ha tomado medidas para reducir las posibilidades de que que se produzcan retrasos similares”.

En su informe, la Comisión recomienda al patrón del barco que se asegure de que sus tripulantes llevan el chaleco salvavidas siempre que se realicen maniobras con riesgo de caída al agua. También encomienda al Servicio de Prevención de Riesgos a que haga obligatorio el uso del chaleco. Por último, también insta a la Comisión de Seguridad en el Trabajo a revisar la operatividad de maniobras como la que produjo el accidente.

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