Salvamento Marítimo (Sasemar) invierte en mejorar sus medios, tanto los marítimos como los aéreos y, por supuesto, los terrestres. Este mes publicó su plan hasta 2024, que incluye, por ejemplo, la incorporación de drones o la construcción de dos remolcadores y nuevas patrulleras. En el mismo texto prevé también la construcción de un nuevo centro de coordinación al sur de España, en Algeciras, así como la renovación de sistemas y equipos del resto de instalaciones. En este último punto el organismo ya está destinando grandes cantidades de dinero para mejorar sus servicios. La última inversión, en Fisterra. Salvamento acaba de licitar un contrato por 6 millones de euros para el suministro e instalación de un sistema de control del tráfico marítimo (VTS, por sus siglas en inglés) para el centro de coordinación (CCS) en la localidad gallega, que vigila a todos los buques que navegan por esa crítica zona costa gallega.
Según recoge el pliego lanzado a principios de mes, el objetivo es “asegurar” la “mantenibilidad a corto plazo” del servicio tras la obsolescencia del VTS actual. “Se ha decidido proceder a su sustitución por equipos de nueva generación”, explica Salvamento Marítimo en el documento, en el que apunta a la “necesaria la actualización técnica del equipamiento existente” de cara a la buena labor coordinada por el centro y, “en especial”, a dispositivo de separación de tráfico marítimo a la altura de Fisterra.
El CCS gallego (uno de los tres, junto con los de Vigo y A Coruña) se encarga de coordinar rescates marítimos en el área que cubre y, sobre todo, controla el tráfico marítimo en una zona muy sensible. Así, el centro vigilar a los buques que navegan por las llamadas “vías de circulación”, que tras el triste naufragio del Prestige se ampliaron para los tránsitos de mercancías peligrosas a granel. Empezando por la más próxima a la costa, hay cuatro: a 21,7 millas (40 kilómetros), a 28,3 millas (52,4 km.), a 35,5 millas (65,7 km.) y a 39,5 millas (73 km.) de Cabo Fisterra.
Para llevar a cabo estas labores, el centro tiene base en Porto do Son, cuatro estaciones remotas en montes de localidades cercanas (Malpica, Muxía, Ribeira y Vimianzo) y una estación repetidora en Mazaricos. “La instalación del equipamiento correspondiente a este suministro se realizará en el Centro de Coordinación y en las estaciones remotas”, recoge el pliego, que señala que “el equipamiento (...) tendrá que integrarse con el equipamiento y las infraestructuras existentes que no van a ser sustituidas”, de modo que el nuevo VTS “deberá ser totalmente compatible con lo actualmente instalado y en uso”.
El plazo para presentar ofertas acaba el 28 de enero
La empresa que resulte vencedora deberá suministrar el hardware y software necesario, así como la ingeniería (incluyendo un plan de migración de la instalación o la formación del personal, de 120 horas), el proceso de instalación o los repuestos.
Las ofertas podrán enviarse hasta el próximo 28 de enero y el plazo de ejecución del proyecto será de 18 meses tras la firma del contrato, por lo que el nuevo sistema podría estar en funcionamiento en 2023.
Inversiones
Tal y como avanzó FARO, el nuevo plan de Sasemar para el período 2021-2024 estará dotado con 173 millones de euros y prevé favorecer un “desempeño más eficaz y eficiente” en las labores de rescate de personas en el mar y la lucha contra la contaminación. Para ello se llevarán a cabo una serie de renovaciones de equipos, entre los que están los sistemas de sensores de los centros de coordinación.
Con esta licitación, son ya casi 38 millones de euros los invertidos por Sasemar en el último trimestre del año, entre la licitación para la construcción de dos embarcaciones tipo Salvamar (4,6), la del proyecto de I+D iSar (19) por el que puja Armón Vigo, la adjudicación de un patrullera oceánica (8,3) y esta renovación de equipos en Fisterra.
