La proliferación de la basura marina es uno de los principales problemas que enfrenta el planeta, en especial por los problemas que generan los llamados microplásticos. Uno de los principales afectados –y una de las actividades que, por su desarrollo, también contribuye a ello– es la flota pesquera, de ahí que en los últimos años no paren de surgir proyectos tanto para evitar la pérdida de aparejos como para la recogida e incluso la reutilización buscándoles un nuevo uso (como, por ejemplo, en el sector textil). Ahora, un estudio analiza la viabilidad de fomentar la limpieza de los mares a través de la financiación de la misma entre los pescadores, bien sea a través de la compra de equipos necesarios como por el pago directo a los marineros. Los investigadores de proyecto europeo CleanAtlantic calculan que se limpiarían 600 toneladas al año de basura marina con el pago de entre 25 y 35 euros por pescador (dependiendo del tipo de barco en el que faenen).
El proyecto está coordinado por el Centro Tecnológico del Mar-Fundación Cetmar y en él participan diversos socios europeos, entre ellos el IEO, la Universidade de Santiago de Compostela (USC) y el Intecmar. Entre los trabajos desarrollados en el marco de esta iniciativa, pensada para prevenir, concienciar e investigar sobre contra la basura marina, están una serie de estudios en el que analizan los datos y encuentras recogidas por los distintos miembros del consorcio. El último de ellos fue publicado este mismo mes, a cargo del centro de investigación francés Cedre, y se centra sobre la Identificación de las iniciativas, medidas y acciones para reducir la presencia de basura en el medio marino.
El estudio señala que “el problema de las basuras marinas está afectando a muchos sectores económicos”, entre los que citan principalmente al “turismo, la pesca y la acuicultura”. Por ello, ofrecen “algunas recomendaciones sobre cómo diseñar las políticas necesarias” para lidiar con los desechos marinos en función de los casos de estudio previos.
Uno de ellos es el que tiene que ver con la flota pesquera gallega. La idea es la de “desarrollar un programa de pesca de basuras”, con las siglas FFL en inglés), “adaptado a las necesidades de los pescadores”.
Para ello, los investigadores plantean dos escenarios: el primero, que califican como “el más optimista”, es que los pescadores participen “sin ninguna recompensa”, la flota gallega recogería 323,6 toneladas anuales, con un coste asociado de 226.000 euros derivado de la compra de material (bolsas, principalmente); el segundo tiene que ver con ofrecer una compensación a los marineros, que irían de los 25 euros por persona a los 35 (en función del tipo de arte que utilice su barco) y que producirían una recogida de 610 toneladas anuales con un coste de 355.850 euros.
Plan para la conserva
Por otro lado, el Cetmar será el encargado de realizar la asistencia técnica en la elaboración de un plan estratégico para el sector de las conservas de pescados y mariscos de Galicia, que está previsto para los años 2022-2030, para ser ejecutada en 2021 y 2022. Así lo recogía ayer el Diario Oficial de Galicia (DOG), a través de una encomienda de la Secretaría General Técnica de la Consellería do Mar.
