Es un actor en crecimiento en el sector, que camina bajo las señales de la diversificación y el crecimiento “sostenido, con sentido”. Acaba de entrar en el selecto grupo de las compañías que rebasan los 100 millones de euros de facturación en el sector, en el que antes irrumpieron Wofco o Fandicosta. Se trata de Congalsa, una de las grandes interproveedoras de Mercadona en Galicia, que presentó en Conxemar nuevas referencias para los segmentos foodservice y retail. “Por mucho que innoves, y aunque destines a ello todos los millones del mundo, el cliente es el que manda”, resume su director comercial y de marketing, Julio Simarro. A él se debe y a él le ofrece “productos para disfrutar en casa, saludables y bio”; a través del canal horeca, facilidades a los profesionales pare reducir desperdicios y ahorrar tiempos. En constante adaptación, la compañía lanza un formato de fábrica 4.0 total, a la que destinará 4,5 millones de euros en un plan de tres años.
Entre los desarrollos piloto – “llegarán para quedarse poco a poco”– figuran los exoesqueletos, que se adentraron por primera vez en la industria gallega a través de la automoción. Pero también la visión artificial, la ciberseguridad o el blockchain, para disponer de una trazabilidad completa de las materias primas. Inteligencia artificial, automatización de procesos, realidad virtual o realidad aumentada forman parte de una iniciativa que ha contado con el apoyo de la Axencia Galega de Innovación (GAIN) –recibió una subvención de 1,6 millones– y el Centro Tecnológico de Telecomunicaciones de Galicia (Gradiant).
Congalsa ejecutó en 2020 su primera operación de crecimiento inorgánico, con la toma de control de la portuguesa Sulpasteis. “Estábamos buscando la empresa ideal, y la encontramos”, abunda Simarro. El anterior responsable de la firma continúa en el proyecto, de modo que no ha perdido un carácter local que también permite al grupo traccionar sus esfuerzos al mercado luso. Sobre la posibilidad de nuevas compras, el responsable comercial no lo descarta. “Tendría que tener sentido, una empresa que nos aporte algo o nos enseñe lo que no sabemos hacer. Si ese fuera el caso, sería una posibilidad”. Congalsa, con base en A Pobra, emplea a más de 350 personas.
