Representantes del sector atunero a nivel internacional realizaron ayer un llamamiento a las administraciones y autoridades para lograr acuerdos comerciales equilibrados y un control adecuado de la actividad en materia medioambiental, sociolaboral y de seguridad alimentaria. Así lo reclamaron en las conclusiones de la X Conferencia Mundial del Atún que, organizada por Anfaco, se celebró ayer y anteayer en Vigo y en la que participaron representantes de más del 90% de la producción de atún en el mundo.

También señalaron que el sector de transformación de productos del mar ha sido “ejemplo de resiliencia” durante la pandemia y garantía de suministro de un alimento estratégico. Por ello, los productores pidieron apoyo de las administraciones para difundir y promocionar el atún y las conservas de atún, al tiempo que reiteraron su “compromiso” con una gestión “sostenible y responsable” del recurso.

Por otra parte, admitieron “preocupación” por la situación de la especies en pesquerías tropicales al tiempo que reclamaron medidas de conservación y ordenación eficientes“ en base a datos científicos y en cooperación con las Organizaciones Regionales de Pesca”. También abogaron por “seguir luchando” contra la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada.

Finalmente, el sector atunero hizo hincapié en el “reto” que supone actualmente un “entorno inflacionista” y las “turbulencias” en la relación entre oferta y demanda, a la hora de garantizarse el aprovisionamiento de materia prima. Al respecto, solicitaron a las administraciones que garanticen la equidad en la competencia (“level playing field”) y lleven a cabo un control efectivo del cumplimiento de la normativa.

Por su parte, la conselleira do Mar, Rosa Quintana, que clausuró la Conferencia Mundial del Atún, también incidió en la “fortaleza” de un sector que en 2020 logró aumentar su producción, facturación y exportación a pesar de la pandemia provocada por el COVID.

Asimismo, resaltó que esa “fortaleza” tiene su base en una estrategia de industria “competitiva, innovadora y sostenible”, que cuenta con “el mejor recurso productivo” y “el valor humano de los profesionales del sector”.

Por otra parte, Quintana reafirmó el apoyo de la Xunta a esta industria, que podrá tener más de 100 millones de euros a su disposición del futuro Fondo Europeo Marítimo de Pesca y Acuicultura, y señaló que el desarrollo del nuevo fondo es uno de los principales retos de Galicia, junto con la revisión de la Política Pesquera Común.

En ese sentido, reiteró que la Administración autonómica apuesta por un sector sostenible y con recambio generacional, para que la cadena mar-industria gallega siga siendo competitiva.