Los líderes del G7 reunidos en Cornualles (suroeste de Inglaterra) abordaron en la última jornada de su cumbre planes conjuntos para afrontar el cambio climático y desarrollar una economía global más sostenible tras la pandemia. El Reino Unido aprovechó anunciar la creación de un fondo de 500 millones de libras (705 millones de euros) dedicado a erradicar la pesca “poco sostenible” en países como Ghana, Indonesia y diversas islas del Pacífico, así como para proteger ecosistemas costeros como corales y zonas de manglares.

“Proteger nuestro planeta es lo más importante que nosotros, como líderes, podemos hacer por nuestra gente. Existe una relación directa entre reducir emisiones, reparar la naturaleza, crear empleos y asegurar un crecimiento económico a largo plazo”, afirmó el primer ministro británico, Boris Johnson.

“Como naciones democráticas, tenemos la responsabilidad de contribuir a que los países en desarrollo cosechen los beneficios del crecimiento limpio a través de un sistema justo y transparente”, agregó.