La Agencia Europea de Control de la Pesca (EFCA) tiene, desde ayer, nueva directora ejecutiva. La irlandesa Susan Steele es, además de la primera mujer que ocupa el cargo, la tercera jefa de la agencia situada en Vigo, sustituyendo al francés Pascal Savouret tras finalizar sus dos años de mandato. Steele concede a FARO su primera entrevista como directora, cargo en el que trabajará codo con codo con la austríaca Veronika Veits, la primera presidenta de la EFCA, nombrada el pasado año.
–¿Cuál es su relación con el sector pesquero español y, en particular, con el de Vigo?
–Crecí en el puerto pesquero de Castletownbere, donde desembarca gran parte de la flota del Gran Sol. Mientras trabajaba en el centro de formación pesquera, formé y conocí a muchas tripulaciones. Cada vez que viajo a Vigo mi primera parada es la lonja. Siempre me ha impresionado el cuidado del sector pesquero español de sus capturas. La pesca es un sector económico importante en Vigo y también muy importante en el contexto de la UE, ya que es el primer puerto pesquero de la UE. Vigo es un importante centro para la actividad pesquera en diferentes dimensiones: desde el pescado congelado hasta el fresco y también para la industria de transformación. Además, existen diferentes instituciones de investigación sobre la pesca con sede en Vigo. Entiendo perfectamente el peso socioeconómico y cultural que tiene el sector en la ciudad y la necesidad de que sea sostenible para que se garantice un futuro para todos.
–¿Cuáles serán sus primeras acciones al frente de la EFCA?
–Mi primera acción será trasladarme con mi familia un mes antes para explorar la región y conocer la cultura y la maravillosa comida. Mi prioridad será organizar una transición fluida con el actual director, Pascal Savouret, e integrarme con el equipo de alto rendimiento. A continuación, trabajaré para hacer frente a los retos actuales con el fin de continuar el funcionamiento de la agencia al más alto nivel de excelencia.
–¿Hay planes para contratar más personal en un futuro próximo o para invertir en el edificio?
–A pesar de que 2020 fue un año particular con la pandemia, el 90% del Programa de Trabajo Anual se implementó con un 97,2% de ejecución presupuestaria. Esto significa que sus capacidades actuales se utilizan al máximo. El control de la pesca es un requisito previo para la sostenibilidad, y garantizar la igualdad de condiciones es ahora más importante que nunca, en particular, después del Brexit.
–Llega a la EFCA en pleno debate en Bruselas sobre la instalación de cámaras en los buques pesqueros. Su predecesor lo consideró necesario y la AECP lo defendió. ¿Comparte usted esta opinión?
–Sin una buena regulación, no hay futuro para la pesca ni para nuestras comunidades costeras. Hay muchas herramientas necesarias para garantizar una buena regulación. No estoy en el puesto hasta el 1 de septiembre y sería prematuro compartir opiniones antes de empezar.
–El nuevo reglamento de control aborda esta y otras medidas, como el seguimiento de toda la flota. ¿Cree que estas medidas son viables para la flota de bajura como la gallega?
–El reglamento de control está todavía en proceso legislativo. No obstante, creo que las tecnologías digitales y la monitorización pueden aportar soluciones viables para un control inteligente de la flota pesquera de bajura. Estoy seguro de que todos los elementos se tendrán en cuenta en la decisión final.
Récord de infracciones detectadas: 1.787 en 2020
Además del nombramiento de Susan Steele, el consejo de administración de la Agencia Europea de Control de la Pesca (EFCA) también adoptó el informe anual de 2020, en el que la pandemia “obligó a la Agencia a adaptar su modelo de trabajo a las nuevas circunstancias”. Durante el año pasado la EFCA detectó 1.787 presuntas infracciones, récord hasta la fecha y un 20,1% más que el año anterior, tras un aumento significativo de las inspecciones, 38.452 (un 18.7% más). La EFCA, además, llevó a cabo el pasado año “un importante trabajo preparatorio” para hacer frente al control de la pesca tras el Brexit. Además, como explica la propia Steele, la ejecución presupuestaria se situó en el 97,2% tras lograr cumplir con un 90% del programa. Por otro lado, su buque, el Lundy Sentinel, “permaneció activo durante todo el año”. La patrullera fletada por la agencia actuó “como plataforma de control e inspección” en aguas reguladas de NAFO y Neafc, es decir, en todo el Atlántico norte.
