La Comisión Europea anunció ayer la apertura de un expediente sancionador contra España, Francia y Suecia por no haber tomado las medidas que establece la normativa comunitaria para evitar la pesca accidental de delfines y marsopas por parte de su flota.

El procedimiento de infracción arranca con una carta de emplazamiento que da un plazo de tres meses a las autoridades españolas para corregir las irregularidades.

En caso de que persista el incumplimiento, Bruselas enviaría un dictamen motivado, que da una segunda oportunidad para alinearse con las reglas de la UE y es la antesala de la última fase del proceso, que supone elevar el caso ante el Tribunal de Justicia de la UE.

Bruselas lamenta que el problema "persiste" con las flotas de España, Francia y Suecia, países que no han tomado "medidas suficientes" para controlar esta pesca accidental. La Comisión también achaca a España y Francia la falta de medidas para garantizar que se realizan los controles e inspecciones necesarios a bordo.