La Organización de Palangreros de A Guarda (Orpagu) ha elaborado "un estricto protocolo sanitario de actuación" ante el coronavirus centrado en un acuerdo con un centro médico especializado para realizar pruebas a sus tripulaciones antes de embarcar.
"Conscientes de esta problemática, y mucho más tras haber vivido el positivo ya conocido en el Ribel Tercero, Orpagu se fijó como obligación hallar la manera de garantizar la salud de todas sus tripulaciones, valorando todas las posibilidades que los especialistas epidemiólogos están barajando", explican.
Según el criterio de los facultativos, se realizarán dos tipos de pruebas: test serológico, que detecta la posible presencia de anticuerpos IgG e IgM frente al SARS COV 2, y, por otro lado, RT-PCR, que permite confirmar o descartar la infección por SARS COV 2, ya que detecta el material genético del virus.
Una vez realizadas las pruebas, los tripulantes permanecerán en una cuarentena controlada hasta su embarque en el palangrero. "Con esto, la flota de Orpagu se garantizaría una marea sin problemas médicos derivados del coronavirus. Este protocolo se pondrá en marcha para los 120 tripulantes que deben salir al mar en las próximas semanas", indican desde la asociación.
El presidente de Orpagu y armador, Joaquín Cadilla, reconoce que la fiabilidad al 100% de las medidas que están adoptando desde la organización es difícil de garantizar, "pero tenemos que hacer todo lo que esté en nuestra mano, para que la gente salga al mar tranquila".
Cadilla reconoce que en estos días el sector se está enfrentando a numerosos problemas y quiere evitar en la medida de lo posible que el miedo al contagio sea un problema añadido a la hora de trabajar en el mar.
