La Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía, que dirige Carmen Crespo, se reunió ayer con parte de los armadores gallegos de fresco que operan en aguas de Mauritania y descargan sus capturas en la comunidad del sur español. En el encuentro, Crespo mostró su apoyo para la renovación del acuerdo pesquero con el país africano, así como para aumentar la cuota de merluza negra si los informes científicos son favorables.

En el encuentro participó la representante de la Confederación Española de Pesca (Cepesca), la armadora marinesa María José de Pazo. Todas las partes destacaron que es un acuerdo "imprescindible para el futuro y continuidad" de la flota y "fundamental" para el puerto de Cádiz.

Según un comunicado de la Junta, Cádiz es el único sitio desde el que se distribuye este tipo de merluza al resto de España y supone una destacada contribución a la generación de empleo directo e indirecto en la ciudad.

Esta flota pide el aumento de la cuota de merluza negra, así como una reducción del canon trimestral de pesca de 90 a 70 euros o, subsidiariamente, en caso de ser desestimado, una bonificación en los desembarques en el puerto mauritano.

Además de todo ello, el sector también reclama la inclusión de la pota dentro del by catch (pescado variado capturado diferente a la merluza), con el objetivo de cumplir con la política de descartes cero de la Unión Europea y porque esta especie cuenta con informes favorables por parte de los comités científicos mixtos.