Los problemas de gestión que arrastraba el Instituto Español de Oceanografía (IEO) y que culminaron este mes con el amarre forzoso de la flota por un error administrativo que los dejaba sin fondos para combustible, víveres y tripulaciones ha finalizado con la dimisión del director, Eduardo Balguerías. El Ministerio de Ciencia aceptó la renuncia del hasta ahora responsable del ente y nombró en su lugar al subdirector general de investigación, Rafael González-Quirós, que dirigirá en funciones este organismo público de investigación hasta el nombramiento de un nuevo titular. Junto a ello, Duque ha encargado la creación de un grupo de expertos formado por científicos y gestores internos y externos para la "recuperación total" del IEO. Un plan consensuado con los directores de los centros oceanográficos repartidos por el país, incluido el de Vigo.
El ministro había anunciado el jueves durante la Comisión de Ciencia, Innovación y Universidades que analizaría la situación del organismo tras el problema burocrático que afectó a la flota formada por cinco buques. "Esto nos ha hecho pedir mucha más información y estamos viendo que sí, que dentro de este organismo autónomo había algo de deficiencia en la gestión; estamos estudiándolo", indicó Duque.
Un día después, ayer, su director, Eduardo Balguerías, presentó su dimisión. Según explicó el Ministerio de Ciencia a través de un comunicado, la renuncia fue admitida poniendo fin a la década de mandato de Balguerías, que entró en el IEO en 1982, fue subdirector general de Investigación entre 2008 y 2010, año en que lo nombraron director.
Misión
MisiónEl nombramiento de Rafael González-Quirós viene acompañado de la creación del grupo de trabajo, cuya "misión" será la de elaborar en el plazo de dos meses un informe de la situación y proponer las medidas necesarias para la recuperación total del IEO. Este grupo de expertos estará liderado por el secretario general de Investigación, Rafael Rodrigo.
Por otro lado, el Ministerio aseguró que analizará la situación "a corto y medio plazo" para garantizar que los proyectos de investigación tengan la continuidad necesaria, el riesgo principal con el amarre de la flota de investigación. "Con estas medidas se pretende que el IEO siga manteniendo el alto nivel de investigación y de prestación de servicios técnicos, tanto a España como a Europa, que ha caracterizado al Instituto y que ha consolidado su visibilidad y prestigio", explicó el Ministerio.
La plataforma EnDefensaIEO, crítica con la gestión del organismo, celebró a través de sus redes sociales el relevo en la dirección. "Parece que empiezan a llegar cambios por fin, empezando por la dimisión del director del IEO. Un primer paso para elaborar un informe en profundidad sobre la situación del IEO y plantear nuevas soluciones organizativas", indicaron.
