María Caldeiro es la gerente de la Fundación para la Pesca y el Marisqueo (Fundamar) desde que se creó en 2010. En estos diez años trabajan para mejorar el sector centrándose en cuatro aspectos: la prevención de riesgos laborales, el fomento de la igualdad de oportunidades, la sostenibilidad y la pormoción y la formación. Fundamar realiza proyectos centrados en estos puntos para mejorar la seguridad, que todo el que quiera acceder a la pesca pueda y para dar a conocer en profundidad al sector a la sociedad.

- ¿Con qué objetivos nació Fundamar?

-Desarrollar proyectos en cuatro áreas en las que la patronal y los sindicatos trabajaban, pero no centraban sus esfuerzos en actividades de carácter más social. Dentro de estas áreas se encuentran la prevención de riesgos laborales, el fomento de la igualdad de oportunidades que pasa por dar visibilidad a la mujer en el sector y llega a aspectos de la innovación social. También trabajamos en la sostenibilidad desde el punto de vista medioambiental y social. Y por último están la promoción y la formación, lo primero con intención de acercar el sector a la ciudadanía, para dar a conocer la repercusión que tiene a nivel social y económico.

- ¿Qué implica que la patronal y los sindicatos estén en constante diálogo?

-Tener ese espacio de reflexión permanente. Implica que dos pilares de nuestra sociedad están de manera continua y regular sentados para tratar aspectos comunes del sector. Está la parte social representada por los sindicatos y los empresarios por la patronal. Para la Administración también es interesante que a través de una entidad se puedan canalizar propuestas e iniciativas.

- ¿Cómo definiría la situación por la que pasa la pesca?

-Hay distintos retos que se tienen que afrontar. Dependiendo de la flota tiene unos más prioritarios que otros. Los barcos que faenan en caladeros británicos deben adecuarse a las nuevas circunstancias. Reino Unido pasa a ser un tercer país, por lo que habría que volver a discutir y acordar derechos de pesca sobre sus aguas. El sector tiene que adaptarse a los requisitos para alcanzar el Rendimiento Máximo Sostenible (RMS) y pelear por la estabilidad relativa. En nuestro ámbito nos parece fundamental la apertura a la sociedad, que se conozca la importancia de la pesca.

-Recalca la necesidad de dar a conocer el sector a la sociedad, ¿no sabe el papel que juega en Galicia?

-Muchas veces, cuando no perteneces al sector, no te das cuenta de todas las ramas que tiene y hasta dónde llega. Queremos llegar a todos esos polos del sector. Para nosotros es fundamental que la sociedad conozca el trabajo del sector y todo lo que abarca, por eso algunos de los proyectos que hacemos van en esta línea. Hacemos visitas a buques congeladores, de fresco, de altura y gran altura, empresas de transformación, viveros de mariscos, el puerto, institutos de investigación marina, escuelas náuticas o hacemos talleres de marisqueo.

- Una palabra que está muy presente es la sostenibilidad, ¿por qué es tan necesario conseguir una pesca sostenible?

-Como en cualquier otro sector, sin sostenibilidad no hay futuro. Pero no solo desde el punto de vista ambiental, sino también a nivel económico y social. La sostenibilidad implica que seamos conscientes de que todos los elementos que conforman un sector son fundamentales para su supervivencia y para mejorar las condiciones de los trabajadores, los beneficios de las empresas y para que todo esté alienado con la sostenibilidad de los recursos.

- La prevención de riesgos laborales es otra rama que trabajan, ¿cuáles son los principales puntos que tratan?

-Hacemos campañas de sensibilización a bordo de los barcos. Es un granito de arena que se pone al sector que suma a la formación y a la sensibilización de los trabajadores y armadores. Las mejoras también tienen que ver con la innovación en los propios buques para mejorar la seguridad a bordo y la confortabilidad, porque no solo hablamos de riesgos ergonómicos, sino que también son psicosociales, ya que dependiendo qué barcos y qué flotas los pescadores están sometidos a riesgos psicosociales como el aislamiento.

- ¿Haría falta también un cambio de mentalidad en torno a la cultura de la seguridad?

-Una de las causas de los accidentes en un barco es la confianza que pueden tener las tripulaciones ante la gestión de una emergencia. En tierra se recibe una formación que debe ser actualizada cada cierto tiempo, aunque quizás sí que habría aspectos que se podían dar de forma más práctica. El hecho de que se practique a bordo, que los mandos sean conscientes de la necesidad de poner en práctica simulacros de emergencia para que se pueda reaccionar a tiempo y con coordinación es fundamental. No podemos olvidar que se trabaja en una estructura inestable y reducida, donde afectan las inclemencias del tiempo. Las características y particularidades del sector complican más la gestión de los riesgos laborales.

- En 2013 iniciaron el proyecto Redmar para normalizar la presencia femenina a bordo, ¿qué balance hace de estos años?

-Lo que queremos con el proyecto es que aquellas mujeres que quieran trabajar en la pesca tengan las mismas oportunidades que un hombre para acceder al empleo. Ahora nos encontramos con que algunas empresas armadoras nos llaman y piden currículums de mujeres. Percibimos que no hay una discriminación por una cuestión de sexo y aprendemos a conocer más la realidad del sector, aproximándonos a las necesidades reales de las mujeres que se quieren dedicar a la pesca. La mujer que se quiere dedicar a la pesca de altura y gran altura sabe que va a estar fuera de su casa tiempo y que las condiciones de habitabilidad no van a ser buenas para ellas ni para los hombres. Lo único que demandan es que se las trate como iguales.

- Voces del sector señalan que hay falta de relevo en la pesca, ¿por qué se da esta situación?

-Una de las razones es el desconocimiento que hay del sector. Es necesario acercar la pesca a los posibles nuevos profesionales. Por otra parte, el propio sector se tiene que hacer más atractivo mejorando las condiciones en la vida a bordo o haciendo más seguro y sostenible el sector. Pero sobre todo hay que cambiar la percepción que se tiene del mar, como que está mal visto. La dignificación del sector es muy importante y tiene que llegar desde varios ámbitos. La Administración tiene que apoyarlo y el sector tiene que hacer sus esfuerzos.