La campaña de la nécora finalizó el pasado 5 de enero (había comenzado el 1 de julio) y las cifras registradas en las lonjas de Galicia reflejan que tanto las capturas como la facturación generada por la subasta de la especie cayeron ligeramente en comparación con las del pasado año.

La flota artesanal gallega desembarcó en los puertos de la comunidad 112 toneladas de este crustáceo, una caída de apenas el 1% ya que en la anterior temporada extractiva la cifra superó las 113 toneladas.

Volumen de negocio

El volumen de negocio se redujo en mayor medida ya que en el presente ejercicio ascendió hasta los 1,94 millones de euros por los 2,01 millones del 2019, una caída del 3,4%, según los datos provisionales consultados en la Plataforma Tecnolóxica da Pesca, dependiente de la Consellería do Mar.

El precio medio de la nécora en Galicia estuvo en torno a los 17 euros el kilo, mientras que en la anterior campaña la media fue de 18 euros. El centro de primera venta en el que más valor de media alcanzó la especie fue en la illa de Arousa ya que se comercializó por 27,3 euros el kilo.

Le siguen las rulas de Vilanova y de O Grove, donde el kilo del recurso se subastó por 24,5 euros. Por otro lado, el precio más alto que se registró en las lonjas gallegas se dio en Pontevedra, donde el crustáceo llegó a venderse por 100 euros el kilo.

En algunos puntos de la costa gallega las ventas en Navidad no dejaron tan buenas sensaciones como en otros años. "Fueron un poco flojas. Como el marisco tenía buen precio en lonja mucha gente se dedicó más a otros recursos que a la nécora", sostiene el presidente de la Federación Galega de Confrarías, José Antonio Pérez. El también patrón mayor de la cofradía de Ribeira señala que los pescadores optaron por capturar pulpo, extraer centolla o dedicarse al marisqueo, "por lo que no cambiaron de arte".

La lonja que más nécora vendió entre julio y el 5 de enero fue la de Vigo. El puerto vigués recibió 21,7 toneladas de este crustáceo por las 24,8 toneladas registradas en el mismo periodo del año pasado, una caída del 12,6%. La facturación también se vio reducida, aunque en menor medida, ya que el centro de primera venta de Vigo ingresó 437.836 euros por los 487.913 euros (un 10,3% menos).

La dársena de A Coruña fue la segunda que más nécora descargó a lo largo del periodo de extracción. La lonja coruñesa subastó 18,4 toneladas de la especie, un descenso del 9% ya que en la anterior campaña la cantidad había alcanzado las 20 toneladas.

A pesar de esta caída, el volumen de negocio generado por la comercialización de este producto disminuyó en mayor medida, ya que el precio medio de la nécora descendió a los 14 euros por los 15 del pasado ejercicio. Por ello la facturación cayó un 15% (se ingresaron 260.882 euros por los 306.970 del pasado año).

En Ribeira la tendencia se invirtió, ya que las descargas de nécora crecieron un 22%. Durante estos meses de campaña la lonja ribeirense subastó 15 toneladas de este crustáceo, mientras que en 2019 la cifra rozó las 13. Los ingresos obtenidos por la comercialización del producto se incrementaron un 20%: en la actual temporada extractiva se facturaron 241.948 euros por los 201.327 del pasado ejercicio.