La compañía pesquera cotizada que más vale en Bolsa es noruega y se llama Mowi. Antes conocida como Marine Harvest, es el resultado de la integración de esta primera sociedad con Pan Fish and Fjord Seafood. Su capitalización bursátil supera los 12.000 millones de euros, tal y como ha analizado el portal especializado Intrafish en el informe World's Largest Seafood Companies: A Definitive Analysis for Investors and Industry. Aunque no es la empresa con mayor volumen de facturación, ya que tanto Maruha Nichiro como Nippon Suisan Kaisha (Nissui), ambas japonesas, registran un mayor volumen de ingresos. Eso sí, nadie arrebata a Mowi su liderazgo global en el mercado de salmónidos.
"No hace mucho tiempo las acuícolas salmoneras cotizadas en la Bolsa de Oslo quedaban fuera de la cartera de los inversores", resume el documento, debido a los "elevados riesgos" y las dudas acerca de los retornos, así como de la elevada fragmentación del sector. Pero Mowi ha roto esa tendencia, y supera con holgura la capitalización de otras salmoneras cotizadas como SalMar. "Por supuesto, un abanico de gigantes asiáticos ocupa un lugar sólido en la lista, pero lo que está claro es que los inversores confían en la seguridad y las perspectivas a largo plazo para el sector del salmón", remata el estudio.
En España -a excepción de Stolt Sea Farm, filial de la británica cotizada Stolt Nielsen-, ninguna pesquera ha sufragado su plan de expansión con su inmersión en renta variable. A cambio, además de los canales tradicionales, ha dado entrada al private equity, con ejemplos como Iberconsa, Discefa, Unión Martín o Angulas Aguinaga.
