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Un caladero clave para una veintena de buques gallegos

El arrastre gallego urge más cupo de merluza en Mauritania y modificar las zonas de pesca

- La flota eleva sus peticiones de cara a las negociaciones de renovación del acuerdo pesquero - Piden 6.000 toneladas de la especie - Los fresqueros insisten en descargar en otros puertos

El "Carmen e Pilar", descargando en Mauritania este año. // FdV

El acuerdo pesquero entre la Unión Europea y Mauritania es utilizado cada año por cerca de una veintena de barcos gallegos, entre palangreros y arrastreros tanto de fresco como congeladores. El actual expira el próximo noviembre y ambas partes se han propuesto comenzar las negociaciones para su renovación y desde el sector ya han elevado sus peticiones, que pasan principalmente por aumentar la cuota de merluza. En el caso de los arrastreros congeladores piden aumentar el cupo a 6.000 toneladas, además de cambiar el área de pesca designada, ya que en la actual no pueden consumir las 1.450 toneladas de calamar y 600 de choco que tienen asignadas. En el caso de los fresqueros, la principal reclamación sigue siendo que se les permita descargar en otro puerto para así evitar los cierres en la frontera que une Mauritania y Marruecos y que hace que su pescado se pudra en ruta hacia España. Las negociaciones darán comienzo en Bruselas a principios de septiembre.

Los buques congeladores, que en su día formaban la flota cefalopodera hasta su expulsión precisamente de este caladero en 2012, está aglutinada en la Asociación Nacional de Cefalopoderos (Anacef). Cada año entre 5 y 6 barcos participan en la pesquería mauritana de merluza y este año sus posibilidades de pesca se agotaron en marzo. Entienden que las 3.500 toneladas disponibles "son totalmente insuficientes" y piden "al menos 2.500" más, ya que según los científicos "es una especie plenamente explotada y , por tanto, sería factible". De igual forma también reclaman tener un cupo de jurel de 3.000 toneladas. Y es que cuando se agotó la merluza Reino Unido cedió 5.000 toneladas, de lo contrario carecerían de cupos.

Por otro lado, las posibilidades de pesca de calamar y choco no se consumen nunca porque la zona designada para la pesca no permite su consumo. Por este motivo desde Anacef solicitan que se varíen las coordenadas en las que pueden operar. De hecho, recuerdan que son "cuotas virtuales" y que la siguen pagando pese a no pescarlas.

Entre otras medidas, también piden que sean los armadores los que elijan a los tripulantes mauritanos (previstos en base al acuerdo) o, como ya habían anunciado en su momento, que no prospere la propuesta de fusión de la categoría 2 (la de fresco) y 2 bis (la suya).

Fresco

Este año 11 barcos de fresco operaron en el caladero y se vieron afectados por los cortes de la carretera que une el país con Marruecos, que continúan a día de hoy. Las pérdidas fueron continuas y, por este motivo, insisten en la creación de una "vía extraordinaria de salida de aguas con un trámite más ágil", para así descargar en puerto marroquí si hay problemas en la frontera. Junto a ello piden más cuota de merluza (tienen un máximo de 6.000 toneladas) e igualar el canon por tonelada que tiene la flota congeladora (70 euros).

En el caso del palangre de fondo (categoría 3) piden poder acceder a las cuotas de merluza, "como se hacía hace años".

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