El Consejo Consultivo de Flotas de larga distancia de la Unión Europea (LDAC) se suma al Parlamento Europeo y aprueba un dictamen en el que pide una moratoria de los proyectos de minería de aguas profundas ante la seria preocupación manifestada por científicos y organizaciones de la sociedad civil sobre su impacto en las pesquerías y especies.

El PE aprobó en enero de 2018 un texto en el que exigen el veto de la actividad hasta demostrar sus efectos medioambientales. El LDAC, por su parte, aconseja no iniciar ningún proyecto a no ser que suponga un beneficio a la humanidad (no solo para una empresa o país) y, asimismo, opina que la Comisión y los Estados miembro deben dejar de financiar, facilitar o promover el desarrollo de la minería submarina y la tecnología que la acompaña.