El atunero vasco Txori Argi sufrió el pasado 21 de abril un ataque pirata en el Índico, a unas 280 millas frente a las costas de Somalia, según pudo saber FARO. Los asaltantes, que utilizaron lanzagranadas en su intento de controlar al pesquero, fueron repelidos por la seguridad privada de a bordo y toda la tripulación se encuentra en buen estado. Entre la treintena de marineros embarcados figuran tripulantes de Cangas do Morrazo y Baiona. El buque, con puerto base en Bermeo, cuenta con una eslora superior a los 106 metros y pertenece a la armadora Inpesca, socia de la viguesa Comercial Pernas (Coper) en Atunlo. La misma embarcación ya había sufrido dos intentos de asalto, en 2009 y 2010, que también fueron abortados gracias al personal de seguridad privada. El Txori Argi fue uno de los primeros atuneros en incorporar este tipo de personal a bordo para garantizar la seguridad de sus tripulantes.
Pero la de este atunero fue solo una de las refriegas de los últimos días en la misma zona, ya que también fueron atacados un mercante de bandera española, el Izar Argia, y el pesquero coreano Adria. Al menos el suceso que afecto a este último buque, según el operativo de la Operación Atalanta, se produjo el mismo día que el del Txori Argi. Fueron estos atuneros, de hecho, los que advirtieron de lo sucedido a las fuerzas especiales desplegadas por la Unión Europea (EU Naval Force) en la zona. En primer lugar se desplegó un operativo aéreo para rastrear la zona, a cargo de un avión patrulla alemán. Inmediatamente la fragata Navarra, de bandera española, abandonó el puerto de Mombasa (Kenia) para dirigirse a la zona. Fue ayer cuando la Navarra alcanzó y neutralizó el dhow (navío pequeño, de casco ovalado) que servía de "nave nodriza" a los piratas. Esta embarcación llevaba remolcados varios esquifes, que son los que emplean los asaltantes, y había sido secuestrado hace cuatro días. Tanto el buque como su tripulación eran de origen yemení.
Las fuerzas que integran la Operación Atalanta destacaron ayer el buen proceder de la seguridad privada del Txori Argi, que aplicó las medidas de protección conocidas como BMP ( siglas de Best Management Practices). "EU Naval Force mantiene su compromiso de disuadir, prevenir y reprimir la piratería y enfatiza que la industria marítima debe cumplir con las medidas de BMP para maximizar la seguridad del barco y sus tripulaciones mientras transitan por la zona de alto riesgo", destacó ayer en un comunicado.
