El Consejo de Ministros aprobó en su reunión de ayer la concesión de residencia y trabajo de nacionales de terceros países enrolados en buques pesqueros de pabellón español que faenan lejos de España en caladeros en los que no existen acuerdos internacionales de pesca. Es decir, la medida facilitará la contratación de extranjeros para la flota y atajará el problema de escasez de tripulantes del que vienen alertando desde hace meses. "Es una gran noticia", indicó Javier Garat, secretario general de la Confederación Española de Pesca (Cepesca), que recuerda que esto llega tras las peticiones del sector y las numerosas negociaciones por parte de la flota aglutinada en la patronal.
La medida fue adoptada a propuesta de la ministra de Trabajo, y previo informe de los Ministerios de Interior, Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, Política Territorial y Función Pública, y con la asesoría del Ministerio de Pesca. Según explicó el Gobierno, con esta instrucción "el enrole autoriza provisionalmente a trabajar y, por tanto, a su alta en el Régimen Especial de Seguridad Social del Mar". De forma paralela "se tramitará la autorización correspondiente por parte de la empresa contratante ante la Oficina de Extranjería".
La nota del Ministerio de Trabajo también incide en que con este acuerdo "se tienen en consideración las especiales y singulares características del sector pesquero" que necesita este tipo de contrataciones debido a que "muchos de los barcos que faenan en aguas internacionales no vuelven a puerto español en varios años y desembarcan sus capturas en puertos extranjeros". "Y se da satisfacción a necesidades del sector pesquero, que venía solicitando reiteradamente que se diera solución práctica al complejo proceso que debían afrontar para la contratación de tripulantes extranjeros en dichos supuestos", concretó el Ministerio.
A la medida podrán acogerse las empresas que lo soliciten, que tendrán que estar inscritas en el Registro de Buques y Empresas Navieras y dadas de alta en el Registro General de la Flota Pesquera.
Complementario
El gerente de la Cooperativa de Armadores de Vigo (ARVI), José Antonio Suárez-Llanos, explicó ayer que esta instrucción "facilita mucho la vida a la flota que tiene los barcos más alejados de España" y quiso poner de relieve los "los pasos dados" para que el sector "tenga primeramente tripulación nacional" y también internacional para "casos concretos como el de estos barcos que no vuelven a puerto.
Y es que desde ARVI también están impulsando la contratación de tripulantes españoles a través de la puesta en marcha de la formación dual en Vigo (tras el caso de éxito llevado a cabo en Celeiro) junto al Instituto Politécnico Marítimo-Pesqueiro do Atlántico, cuyo inició se prevé de cara al curso 2019-2020, tal y como publicó FARO en exclusiva.
Javier Garat, por su parte, recuerda que la medida adoptada por el Gobierno supone un parche "a corto plazo". "Hay una realidad: tenemos esa escasez de tripulantes. La flexibilización para la contratación de extranjeros era de una las medidas que impulsamos para atajarlo", comentó. "Pero -añadió- lo principal es atraer a los tripulantes españoles y para eso estamos con la formación dual, la revisión de las titulaciones y un acercamiento a las escuelas naútico-pesqueras del país". "El sector pesquero tiene que estar muy feliz", resumió Garat.
