El gas natural licuado (GNL) se perfila como una alternativa de combustible marino que, en el caso gallego, supondría un ahorro de hasta 21,2 millones de euros en el caso de que la flota pesquera y de titularidad autonómica se pasara a este suministro.

Así lo ha explicado a Europa Press el director del proyecto HUB de Reganosa, Carlos Vales, que dirige la adaptación de la entidad ubicada en la ría de Mugardos para propiciar este cambio. El año 2020 será el momento culmen para el inicio de las operaciones de gas natural licuado a pequeña escala, que actualmente ya se realizan de forma ocasional y, para ello, la terminal de Reganosa que opera en Ferrol dispondrá de nuevas infraestructuras e incorporará procedimientos que ahora están en desarrollo al amparo del proyecto europeo Core Lngas hive.

La idea es que los buques a gas natural licuado puedan aprovisionarse en la propia terminal de Reganosa, ubicada en el puerto considerado más resguardado del norte de la península Ibérica -no cerró al tráfico desde 2001-, en la ría ferrolana.

También se ofrecerá el servicio a través de un barco de suministro con base en el puerto exterior de Ferrol, que surtirá de gas natural licuado a la flota en zonas de fondeo próximas.