Pesca, marisqueo y acuicultura hacen de Galicia una potencia mundial. Esto se traduce en una importante flota, a pesar de los descensos experimentados en los últimos años. El actual arranca con 5.650 naves -55 menos que en enero de 2017- inscritas en el Registro de Buques de Galicia.
Se trata 97 buques que faenen en la pesquería internacional (gran altura), 70 que lo hacen en la comunitaria (altura), 4.207 pertenecientes al Caladero Nacional (Cantábrico/Noroeste) y de 1.276 barcos considerados auxiliares de acuicultura, es decir, los empleados por bateeiros, parquistas y similares.
Del total de embarcaciones inscritas nada menos que 4.471 se encuentran en las Rías Baixas, lo cual es tanto como decir que el 70% de los barcos gallegos amarran en Arousa (2.595 naves), en la ría de Vigo (796), en la de Muros-Noia (658) y en la de Pontevedra (422).
Las demás se encuentran repartidas en las zonas de Coruña-Ferrol (464), Costa da Morte (280), A Mariña (188), Fisterra (127) y Cedeira (120).
Dentro de las mismas pueden destacarse, por el número de barcos que albergan, a puertos tradicionales de la flota artesanal y/o de artes menores también plenamente consolidados en el sector mejillonero, como es el caso de A Illa de Arousa, que da cobijo a 560 embarcaciones; O Grove, que hace lo propio con 308; Cambados, con 271 naves; Ribeira, con 253; y Cabo de Cruz (Boiro), que reúne a 226 barcos.
Lógicamente hay otros muelles importantes en los que tienen mayor peso -aunque en menor cantidad- los grandes buques, como puede ser el caso de Vigo con 122 naves censadas.
Y hay que sumar radas con tanto protagonismo como Cangas, Moaña y Bueu, que tienen prácticamente el mismo número de barcos, en torno a 165.
Como se explicaba anteriormente el segmento más importante es el que representa el Caladero Nacional, ya que en él faenan el 74% de las naves gallegas.
Dentro del mismo hay que diferenciar entre las dedicadas al arrastre (64), cerco (152), palangre de fondo (23), palangre de superficie (50 naves), los barcos que usan rascos (3), los de volantas (23) y los que pueden considerarse la "estrella de la corona" en Galicia, los de artes menores (3.892).
Respecto a esa última cifra, que hace referencia, por ejemplo, a las pequeñas lanchas empleadas para marisqueo a flote, hay que decir que el 79% de las mismas se sitúan en las Rías Baixas.
Asimismo, algo más de la mitad, concretamente 1.632 embarcaciones de artes menores, amarran en la ría de Arousa, mientras que 591 lo hacen en la de Muros-Noia, 541 figuran inscritas en la de Vigo y 306, en la de Pontevedra.
El otro gran subsector que contribuye a situar a las Rías Baixas en un lugar privilegiado es el de los barcos dedicados a la acuicultura, sin duda gracias a la fuerte implantación del cultivo de mejillón en batea.
Prueba de ello es que el 88% de los buques auxiliares existentes en toda Galicia amarran o fondean en las rías de Vigo (112), Pontevedra (86), Muros (32) y, por supuesto, Arousa, que con 890 de esos barcos alcanza por sí sola el 70% de los existentes en toda la comunidad autónoma.
