El Comité Científico, Técnico y Económico de Pesca (Stecf, por sus siglas en inglés) de la Comisión Europea estima necesario encontrar "modelos y programas predictivos mejorados" para detectar las popularmente conocidas como mareas rojas que afectan al sector mejillonero gallego "para minimizar las pérdidas económicas" asociadas. En su último informe sobre la acuicultura en la Unión Europea, el Stecf hace un repaso sobre la producción de mejillón concentrada principalmente en la comunidad gallega. En el análisis reconoce que el efecto de los episodios de biotoxinas marinas es una "amenaza" por "la creciente frecuencia" y que se ha convertido en "el problema principal en la industria" mejillonera. De hecho, los expertos de Bruselas indican que este "factor impredecible" puede llegar a disminuir la producción de las bateas "a la mitad en un año".
En el balance sobre la acuicultura publicado a finales de la semana pasada, el Stecf señala que en el año 2016 el sector alcanzó una producción de 1,4 millones de toneladas en la UE (+6%), lo que supuso ventas por 4.900 millones de euros (+8%). En lo que respecta al sector mejillonero, en la UE se produjeron 481.000 toneladas (-2%) que alcanzan un valor de 365 millones de euros (-3,5%). España, con Galicia al frente, es el principal productor del oro negro de las bateas. En la comunidad se consiguieron aquel año 215.000 toneladas, un 4,3% menos debido a las biotoxinas marinas, por un valor de 118 millones de euros (+2,4%, debido a que le precio por kilo, 0,55 euros, fue el más alto desde 2008).
Desde el Stecf consideran a Galicia un referente -"un sector tradicional y consolidado"- en mejillón, pero alertan de las "altas fluctuaciones en el tiempo" de su producción anual debido a las mareas rojas. "La evolución ilustra cómo de dependiente es la producción de mejillón de las condiciones ambientales en Galicia, donde las mareas rojas pueden cerrar las áreas de producción por largos períodos de tiempo", explican.
En este sentido, urgen esa investigación en nuevos métodos para encontrar modelos predictivos y se puedan llegar a evitar o retrasar los habituales cierrres de polígonos, que en el caso gallego llega a través de los controles con muestras del Instituto Tecnolóxico para o Control do Medio Mariño de Galicia (Intecmar).
Precisamente este verano investigadores de la Universidad de Vigo, del Instituto de Investigaciones Mariñas (IIM) y del Instituto Español de Oceanografía (IEO del centro vigués) peinaron las rías de Vigo y Pontevedra en el marco del proyecto Remedios para "contribuir a la predicción y alerta temprana de los eventos de toxicidad".
