La Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes Marítimos (Ciaim), dependiente del Ministerio de Fomento, ha publicado el resultado de la investigación desarrollada para determinar la causa del incendio del pesquero gallego O Busi en 2017 frente a Cedeira y revela, entre otras conclusiones, que la tripulación -formada por ocho marineros- no estaba familiarizada con los procedimientos a seguir en caso de incendio, por lo que fue incapaz de evaluar correctamente la emergencia y consideró que su única opción era abandonar la embarcación.

El pesquero empezó a arder alrededor de las 17.45 horas del 14 de marzo de 2017 a 10 millas al noroeste de Cedeira. El patrón notó que salía humo de un cuadro eléctrico y al abrirlo descubrió que había un incendio en la sala de máquinas. Intentó acceder a la estancia, pero no pudo avanzar debido a la gran cantidad de humo y tuvo que salir al puente para coger aire. La comisión concluye que la tripulación tenía una "grave falta de familiarización con los procedimientos y los sistemas contraincendios", circunstancia que provocó que no consiguieran evaluar adecuadamente la emergencia ni buscar soluciones. Ninguno de los tripulantes resultó herido y fueron rescatados por Salvamento tras saltar a las balsas salvavidas.