El centro oceanográfico de Vigo del Instituto Español de Oceanografía (IEO), en colaboración con el de Tenerife, ha logrado cristalizar un proyecto que ambiciona la industria pesquera de todo el mundo: la cría de pulpo . Y lo ha logrado tras veinte años de investigaciones, por eso el centro ha destacado que este avance supone un "hito científico internacional".

Este avance consigue superar lo que hasta el momento se consideraba como el principal escollo para el cultivo comercial de esta especie, aplicando además una metodología que es más rentable y replicable que las desarrolladas hasta ahora. Por todo ello, los esfuerzos actuales se centran en la obtención de juveniles y el estudio de su viabilidad económica. Diversas iniciativas en Estados Unidos o Portugal se toparon recurrentemente con la elevada mortalidad de los pulpos en fase larvaria.

Demanda

El pulpo común tiene un ciclo corto de vida pero con potencial de crecimiento, lo que le convierte en una especie idónea para su cultivo y desarrollo en cautividad. En la actualidad es un producto muy demandado en los mercados nacionales e internacionales y con mucho interés comercial, que ha provocado un incremento de su pesca y de estudios e investigaciones científicas para domesticar esta y otras especies de este cefalópodo.

Además, es una especie de gran interés comercial en España y el Mediterráneo y su demanda es cada vez mayor en otros países como es el caso de Estados Unidos lo que, unido a su elevado precio en el mercado, hace que sea un excelente candidato para la diversificación de la acuicultura, explica el IEO.

Los pulpos pasan por diferentes etapas en su desarrollo: huevos, paralarvas, juveniles y adultos. Los ensayos realizados en el IEO, basados en esta patente, mejoran los resultados obtenidos hasta ahora en el cultivo larvario y han conseguido obtener juveniles con los cuales iniciar la fase de engorde hasta llegar a adultos.

Recientemente el IEO y Nueva Pescanova han firmado un contrato por el que la empresa tiene una opción preferente de licencia de la patente del Instituto Español de Oceanografía sobre estas investigaciones. Con este avance se consigue superar lo que hasta el momento se consideraba como el principal escollo para el cultivo comercial de esta especie. Por ello, los esfuerzos se centran ahora en obtener juveniles y en estudiar su viabilidad económica.