La organización conservacionista Sea Shepherd ha celebrado la sanción de 8,2 millones de euros del Ministerio de Pesca a tres empresas gallegas y ocho personas por pesca ilegal como armadores del Thunder y el Tchaw. Y es que la organización fue la responsable de la persecución de 110 días que dio como resultado el hundimiento del primer buque mencionado en aguas de Santo Tomé en 2015, siendo rescatada su tripulación y juzgados sus mandos por el naufragio.
Peter Hammarstedt, director de Campañas Global de Sea Shepherd aplaudió la acción de España en relación al Thunder, "un barco furtivo que se ha beneficiado financieramente durante más de una década de la pesca ilegal en la Antártida". A su juicio, "lo que es más importante" en la sanción impuesta es "la inhabilitación para futuras actividades pesqueras y la prohibición de recibir subsidios" para las ocho personas implicadas. "Envía un fuerte mensaje de que la pesca ilegal, no importa en qué parte del mundo se lleve a cabo, no será tolerada por el Ministerio de Agricultura español", comentó Hammarstedt.
Tras el hundimiento del Thunder, dos gallegos (Agustín Dosil y Luis Miguel Pérez) y un chileno fueron multados con 15 millones de euros y condenados a penas de entre 32 y 36 meses de cárcel cada uno.
