La Agencia Europea de Control de la Pesca realizó en 2016 casi 20.000 inspecciones en diferentes caladeros e identificó 615 infracciones, según ha detallado hoy su director ejecutivo, Pascal Savouret, en rueda de prensa.

Las inspecciones realizadas durante el pasado ejercicio superan en 3.000 a las ejecutadas durante 2015, y las infracciones identificadas deberán ser "confirmadas" ahora por los Estados miembros a través de procesos judiciales o administrativos.

Savouret ha hecho públicos estos datos durante la visita de un grupo de diputados de la Comisión de Pesca del Parlamento Europeo para examinar el trabajo realizado por la Agencia, con sede en Vigo, y discutir las prioridades y retos futuros.

El vicepresidente de la Comisión de Pesca, Werner Kuhn, ha defendido la "armonización de los mecanismos de control" pesqueros para que "todos los actores" trabajen "en igualdad", todo ello a pesar de que cada Estado miembro "barre para casa" y defiende "que sus controles son los mejores", ha dicho.

Kuhn ha hablado también del papel que juega la Agencia Europea de Control de la Pesca en la vigilancia y rescate de los refugiados que llegan a Europa a través de rutas marítimas, colaborando con la Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costas (Frontex) y la Agencia Europea de Seguridad Marítima (EMSA).

Esta extensión de las tareas de la Agencia, ha añadido Pascal Savouret, "requiere más recursos" para "enfrentarnos a problemas muy importantes en el Mediterráneo y otros caladeros", ha indicado, no solo relacionados con la pesca ilegal, sino también con el tráfico de personas.

Por ello, la Agencia colabora con Frontex y con la EMSA realizando "acciones conjuntas" e intercambiando datos e informaciones.