La población de bacalao del Mar Báltico se ha deteriorado por la falta de espadín y, sobre todo, por los fondos de bajo oxígeno. Así lo explica un estudio del Departamento de Recursos Acuáticos de la Universidad de Suecia recogido por Industrias Pesqueras, que señala que "desde mediados de la década de 1990 (...) se ha encontrado cada vez mayor número de bacalao delgado y huesudo".

Según Michele Casini, profesor en el Departamento de Recursos Acuáticos, la reducción de la población de espadín, "la principal presa de pescado de bacalao", ha contribuido a este fenómeno. "También vemos un aumento de cinco veces de fondos de bajo oxígeno, lo que ha provocado una reducción de organismos bentónicos", explica.

Esta falta de oxígeno hace que las áreas en las que el bacalao pueda vivir se reduzcan, causando cambios en el hábitat, así como el hacinamiento y una mayor competencia