Pocos productos gastronómicos están tan intensamente ligados a Galicia como el pulpo. El polbo á galega es todo un símbolo no solo en la Comunidad, sino que también fuera de ella. Sin embargo, son los pescadores de Asturias los que podrán agregar al pulpo que capturen en sus aguas el reconocido certificado del Marine Stewardship Council (MSC). El jueves, en un acto en Puerto de Vega, cuatro cofradías con 27 lanchas celebraron que, tras dos años de proceso, lograron el sello, el primero del mundo para esta especie. ¿Y qué opina el sector gallego? Con más de 1.000 embarcaciones, los productores están convencidos de que el suyo es un pulpo de sobra reconocido y entienden que una ecoetiqueta no es necesaria. "Poco más se puede realzar el prestigio de nuestro producto", indican desde las cofradías.
Así lo explica por ejemplo José Manuel Rosas, patrón mayor del pósito de Bueu, uno de los principales en cuanto a la captura de este cefalópodo se refiere. Rosas, que recuerda que las navajas que capturan ya obtuvieron la certificación de MSC ("fuimos la primera del mundo"), creen que el sello "no reporta el beneficio esperado". "Es un proceso costoso y cuando se consigue luego hay unos gastos y evaluaciones para ver si cumples los requisitos", explica Rosas, cuya cofradía cuenta con casi un centenar de permex.
Caso asturiano
Sin embargo, los asturianos sí que optaron por esa ecoetiqueta. En su caso, iniciaron el proceso hace cuatro años, recopilando la información y haciendo una preevaluación confidencial para saber si cumplirían con el estándar MSC. A finales de 2014 entraron en evaluación formal y el proceso "ha culminado con éxito", como señala Laura Rodríguez Zugasti, directora de Programa MSC para España y Portugal. "Algunas de los elementos favorables con los que han contado ha sido ponerse de acuerdo cuatro cofradías para llevar a cabo el proyecto de forma conjunta, contar con un apoyo continuo por parte de la administración y el Ceder de Navia Porcía (Grupo de Acción Costera) y tener un plan de gestión muy sólido y con alto grado de cumplimiento", apunta Rodríguez.
En total son cuatro cofradías (Nuestra Señora de la Atalaya de Puerto de Vega, Nuestra Señora de la Caridad de Ortiguera, Santo Ángel de la Guarda de Viavélez y San Pedro de Tapia de Casariego) y otras cuatro que podrían unirse: Cudillero, Oviñana, Luarca y Figueras.
Marcas
Rosas, que desea a los asturianos "que al final consigan ese valor añadido" para su pulpo, recuerda que "es el consumidor el que tiene la última palabra para elegir entre las diferentes marcas". Es por eso que quiere poner de relieve los diferentes distintivos que existen en Galicia para diferenciar su producto del resto. Una de ellas, sin duda, es Polbo das Rías, nacida en Bueu. Pese a "no contar con el interés de las instituciones", como señala Rosas, siguen manteniendo esta marca colectiva con la que quieren diferenciar a su famoso pulpo del resto.
Otra marca similar es Pulpo de Lonja, plataforma creada a través del Grupo de Acción Costera 4 para comercializar producto procedente de las cofradías de Finisterre, Corcubión, Lira, Muros, O Pindo y Porto do Son. "Se busca certificar y garantizar la procedencia del producto, añadiéndole valor", explica Tomás Fajardo, presidente de la Federación Galega de Confrarías de Pescadores y patrón mayor sonense, pósito que vive en un 90% de las capturas de este cefalópodo.
Sin embargo, la que más resaltan desde las cofradías es la marca PescadeRías, surgida en el año 2008 de la Consellería do Mar para diferenciar los productos de la flota artesanal gallega. "Entendemos que tenemos una marca en Galicia que debemos proteger y potenciar. Es gratuita, con promoción y campañas publicitarias", concreta José Antonio Gómez, presidente de la Federación Provincial de Confrarías de Pontevedra, que también recuerda que MSC "tiene unos costes muy altos".
A juicio de Gómez, el producto asturiano "quizá no está tan reconocido en el mercado como el nuestro". Una opinión que concuerda con la de Fajardo, que también añade que "ellos allí no cuentan con una marca como PescadeRías".
Certificadora de certificados
Para evitar este conglomerado de marcas y certificados que cumplen con estándares para buscar la sostenibilidad en la pesca surgió la Iniciativa Global para los Productos Pesqueros Sostenibles (GSSI), cuyo objetivo es identificar cuales de ellos cumplen con criterios basados en el Código de Conducta Responsable para la Pesca de la FAO.
Presentado en Vigo el pasado mes de octubre durante el congreso de FAO y Conxemar, GSSI es de carácter voluntario por parte de las propias certificaciones y costeada por ellas mismas a través de una cuota. Esta primavera se darán a conocer los primeros sellos que superaron la "prueba".
