La asamblea de los armadores de cerco que comparten sus cuotas dentro de la Asociación de Armadores de Cerco de Galicia (Acerga) celebrada ayer en Portosín parecía que traería consigo una decisión radical. La flota, dispuesta a realizar un amarre "que vaciase el mercado", finalmente no llegó a un consenso y proseguirán trabajando sin abandonar sus movilizaciones en los puertos. La Xunta de Galicia, a través de la conselleira de Medio Rural e do Mar, Rosa Quintana, prometió el jueves al sector que buscarían más cuota de jurel para la zona VIIIc (de Fisterra a Vizcaya) y a eso se aferra el 75% de la flota cerquera gallega, que es la que está en Acerga.
La asociación se marcó un mínimo del 80% de sus asociados para apostar por paralizar la actividad, pero los votos no fueron los suficientes. "Unos quieren y otros no", destacó el portavoz de Acerga, Andrés García. Con este panorama, a los cerqueros no les queda otra que confiar en la palabra de la conselleira. Aunque no las tienen todas consigo. "Nos dijeron que estaban trabajando en conseguir cuota pero no sabemos cómo están buscando ni cómo dejan de buscar", sentenció molesto.
Quintana, que se mostró comprometida con la flota, entendió la situación de los armadores y les demostró su compromiso. "El apoyo nos gustaría que fuera de otra manera. Lo que ocurre ahora hay que cambiarlo de alguna manera, este reparto no se puede seguir dando. Pedimos que se anule y que se abra otro", apuntó García.
Por otro lado, Acerga también acordó rechazar la opción de seguir con los 1.000 kilos de jurel a la semana en caso de que el cupo finalmente se aumente. "No es viable tampoco si la cuota que nos dan es pequeña y con eso no se puede trabajar", explicó el también patrón mayor de Sada.
Sobre la anchoa en la zona IXa (de Fisterra a Cádiz), la responsable de Mar también dejó patente que la Xunta estaba "de acuerdo con la reivindicación" del sector, que viene solicitando a Pesca que cumpla con la promesa realizada por el anterior secretario general, Carlos Domínguez, que estipulaba que en caso de que la especie apareciese en las costas gallegas los barcos podrían pescarla. Algo que todavía no se ha producido a pesar de la abundante anchoa que ven los barcos.
