El episodio tóxico que afecta a las bateas de mejillón gallegas desde principios de abril tiende a remitir. Ayer se reabrieron de golpe cuatro polígonos bateeiros en Arousa -en A Pobra, Vilagarcía y Cambados- y dos de la ría de Vigo -en Cangas y Redondela-. Esto quiere decir que ya están operativos para la extracción de mejillón 16 de los 50 polígonos existentes en Galicia. Dos se sitúan en aguas de Ares-Betanzos, ocho en la ría arousana y seis en la de Vigo.

El porcentaje es todavía bajo, no cabe duda, pero todo indica que el nivel de toxinas lipofílicas seguirá en descenso en próximos días, lo cual permitirá al sector retomar la actividad extractiva y, si todo sale según lo previsto, llegar en plenitud de condiciones a la campaña estival.En cuanto a los bancos de moluscos infaunales -almeja, berberecho y similares- la situación también tiende a mejorar, y de hecho ayer se abrió una zona más en la ría de Vigo y otra en Ferrol; como se autorizó la extracción de navaja y longueirón en una zona de Muros.