El actual no apunta como un gran año para la producción de algas en la costa gallega. Los fuertes y sucesivos temporales que azotaron el mar y sus fondos en los últimos meses han desprendido o debilitado ingentes cantidades de verduras marinas en plena época de crecimiento. Lo dicen los expertos pero, pese a previsible bajada de producción, que también se notó el pasado año, el aprovechamiento comercial de las algas va en aumento en Galicia. Así lo constatan tanto las empresas que cada vez con mayor intensidad utilizan las algas para usos alimenticios, gastronómicos o farmacéuticos, como las propias lonjas gallegas.

Y es que la comercialización de las algas -con el argazo (Laminariaceae) y el golfo (Undaria pinnantifida) como especies mayoritarias- parece ir en llamativo aumento en las rulas gallegas en los últimos años, hasta el punto de que en los últimos tres ejercicios las ventas de tales recursos se han triplicado. Lo demuestran los datos del portal pesquero autonómico Pescadegalicia, de la Plataforma Tecnolóxica da Pesca, dependiente de la Consellería do Medio Rural e do Mar. En función de los datos -los primeros son de 2004- se constata que mientras en 2010 la comercialización de algas en las lonjas de Galicia sumó en conjunto poco más de 55 toneladas, el pasado año esa cifra superó las 160 toneladas y eso pese a la baja de producción registrada por el mal mar que también padeció Galicia ese invierno. Y, solo un año antes, en 2012, la comunidad batió el récord de comercialización de algas en las lonjas, al acercarse a las 200 toneladas. Antes de 2010 nunca se alcanzaron las 90 toneladas al año de ventas de algas en lonja. Y en términos económicos, aunque muy modesto (el precio medio no supera el euro por kilogramo,) la actividad también va subiendo. El pasado año, se acercó a los 100.000 euros y en 2012 pasó de los 120.000, cuando lo habitual era entre 30.000 y 50.000 euros, con algún pico máximo de 70.000, como ocurrió en 2007.

La extracción de algas, tradicionalmente utilizadas en la agricultura costera como fertilizante natural tras su recogida directa en playas y rocas, está regulada en la actualidad por la normativa específica de la Consellería do Medio Rural e do Mar.

Así, en el Plan Xeral de Explotación Marisqueira para este año, se concretan autorizaciones y condiciones para recoger algas (plan de explotación, días máximos de actividad y zonas de trabajo) a cinco empresas. Además, la administración autonómica establece 14 planes de explotación (a pie o para buceo) en la costa gallega (5 en A Coruña y 9 en la de Pontevedra).